Sensibilidad Dental: Causas y Tratamiento

La sensibilidad dental es un problema común que afecta a muchas personas en todo el mundo. Se caracteriza por una sensación dolorosa y aguda en los dientes al entrar en contacto con estímulos externos, como alimentos fríos, calientes, dulces o ácidos, así como al cepillarse los dientes o al respirar aire frío. Esta condición puede ser causada por varias razones y, afortunadamente, hay varias formas de tratarla.

Una de las principales causas de la sensibilidad dental es la exposición de la dentina, la capa interna de los dientes, que normalmente está protegida por el esmalte dental y las encías. Cuando el esmalte se desgasta o se erosiona, la dentina queda expuesta, lo que permite que los estímulos externos lleguen a los nervios dentro del diente, causando dolor. El desgaste del esmalte puede ser el resultado de varios factores, como el cepillado demasiado vigoroso, el bruxismo (rechinar de dientes), el consumo excesivo de alimentos y bebidas ácidas, y el desgaste natural debido al envejecimiento.

La retracción de las encías también puede contribuir a la sensibilidad dental. Cuando las encías se retraen, exponen las raíces de los dientes, que no están protegidas por esmalte y son más sensibles a los estímulos externos. La recesión gingival puede ser causada por enfermedad de las encías, cepillado incorrecto o bruxismo.

Otra causa común de sensibilidad dental es la presencia de caries dentales o de obturaciones dentales defectuosas. Cuando las caries o las obturaciones no están tratadas adecuadamente, permiten que los estímulos externos lleguen a los nervios dentro del diente, causando dolor y sensibilidad.

La abrasión dental también puede ser un factor en la sensibilidad dental. Esto ocurre cuando se utiliza demasiada presión al cepillarse los dientes o al utilizar objetos extraños para limpiar los dientes, como palillos de dientes o alfileres. La abrasión puede desgastar el esmalte y exponer la dentina, lo que lleva a la sensibilidad dental.

Para tratar la sensibilidad dental, es importante identificar y abordar la causa subyacente. Si el problema es el cepillado demasiado vigoroso, se recomienda utilizar un cepillo de dientes de cerdas suaves y cepillar los dientes con movimientos suaves y circulares. También es importante evitar el consumo excesivo de alimentos y bebidas ácidas, así como utilizar protección para los dientes, como un protector bucal, si se sufre de bruxismo.

En casos de retracción gingival, es posible que sea necesario realizar un injerto de encía para cubrir las raíces expuestas y protegerlas de la sensibilidad. Además, el dentista puede aplicar selladores dentales o barnices de flúor en las superficies expuestas para ayudar a reducir la sensibilidad.

Si la sensibilidad dental es causada por caries dentales o obturaciones defectuosas, el dentista puede recomendar tratamientos como empastes dentales, endodoncias o coronas para reparar el daño y aliviar la sensibilidad.

En algunos casos, puede ser necesario recurrir a tratamientos más avanzados, como la aplicación de agentes dessensibilizantes o la realización de procedimientos periodontales para tratar la sensibilidad dental.

En resumen, la sensibilidad dental es un problema común que puede ser causado por varias razones, incluyendo el desgaste del esmalte, la retracción gingival, las caries dentales y la abrasión dental. El tratamiento de la sensibilidad dental depende de la causa subyacente e incluye medidas como el uso de cepillos de dientes suaves, la aplicación de selladores dentales, el tratamiento de caries dentales y la realización de procedimientos periodontales. Es importante consultar a un dentista si se experimenta sensibilidad dental persistente para identificar y tratar adecuadamente la causa del problema.

Claro, aquí hay más información sobre la sensibilidad dental y sus causas:

1. Desgaste del esmalte dental: El esmalte dental es la capa protectora más externa de los dientes y es la sustancia más dura del cuerpo humano. Sin embargo, puede desgastarse con el tiempo debido a factores como el cepillado vigoroso, el uso de un cepillo de dientes con cerdas duras, el consumo excesivo de alimentos y bebidas ácidas, el rechinar de dientes (bruxismo) y el envejecimiento. Cuando el esmalte se desgasta, la dentina subyacente queda expuesta, lo que puede causar sensibilidad dental.

2. Recesión gingival: La recesión gingival ocurre cuando las encías se retraen y dejan expuestas las raíces de los dientes. Esto puede ser causado por enfermedad de las encías (gingivitis o periodontitis), cepillado dental agresivo, mal posición de los dientes, traumatismos o factores genéticos. Las raíces dentales no están protegidas por esmalte y son más sensibles a estímulos externos, lo que puede resultar en sensibilidad dental.

3. Caries dentales: Las caries son áreas de deterioro en el esmalte dental causadas por bacterias que producen ácidos al alimentarse de restos de comida. Si no se tratan, las caries pueden llegar a la dentina y los nervios del diente, causando sensibilidad dental y dolor.

4. Obturaciones dentales defectuosas: Las obturaciones dentales, también conocidas como empastes, se utilizan para restaurar dientes que han sido dañados por caries. Si una obturación está defectuosa o no sella correctamente la cavidad, puede permitir que los estímulos externos lleguen a los nervios del diente, causando sensibilidad.

5. Abrasión dental: La abrasión dental es el desgaste del esmalte dental debido a la fricción mecánica, como el cepillado dental excesivo o el uso de objetos extraños para limpiar los dientes, como palillos de dientes. Esto puede exponer la dentina y causar sensibilidad dental.

6. Consumo de alimentos y bebidas ácidas: Los alimentos y bebidas ácidas pueden erosionar el esmalte dental con el tiempo, lo que puede contribuir a la sensibilidad dental. Los ejemplos incluyen bebidas carbonatadas, jugos cítricos, vinagre y alimentos encurtidos.

7. Tratamientos dentales: Algunos procedimientos dentales, como el blanqueamiento dental y la limpieza profesional, pueden causar sensibilidad dental temporal debido a la exposición de los nervios del diente durante el tratamiento.

Para tratar la sensibilidad dental, es importante abordar la causa subyacente. Además de las medidas mencionadas anteriormente, como el uso de cepillos de dientes suaves, la aplicación de selladores dentales y el tratamiento de caries dentales, también existen productos de venta libre diseñados específicamente para reducir la sensibilidad dental, como pastas dentales y enjuagues bucales dessensibilizantes que pueden ayudar a bloquear los túbulos dentinarios expuestos y reducir la sensación de dolor. Sin embargo, es importante consultar a un dentista para un diagnóstico y tratamiento adecuados si se experimenta sensibilidad dental persistente o severa.