Leche y queso

Queso Akkawi: Sabor y Tradición

La Queso Akkawi: Un Tesoro de la Gastronomía Árabe

La queso Akkawi, conocida en árabe como «عكاوي» (Akkawi), es una de las variedades de quesos más representativas de la región árabe, especialmente en países del Levante como Siria, Líbano, Palestina y Jordania. Su nombre proviene de la ciudad de Akkah en el norte de Líbano, aunque en la actualidad se produce también en varias otras partes del mundo árabe. Este queso es conocido por su textura suave, su sabor delicado y su versatilidad tanto en platos dulces como salados.

En este artículo, exploraremos a fondo la historia, las características, el proceso de elaboración, y las múltiples formas en que la queso Akkawi se utiliza en la cocina, destacando su importancia cultural y gastronómica en el mundo árabe.

Origen e Historia de la Queso Akkawi

El queso Akkawi tiene una larga tradición que se remonta a siglos atrás, siendo considerado un alimento básico en la dieta mediterránea y árabe. Se cree que su nombre proviene de la ciudad de Akkah en Líbano, una localidad histórica en la que se producían quesos de gran renombre. De hecho, la región del Levante ha sido durante mucho tiempo un crisol de influencias gastronómicas y comerciales, lo que permitió que el queso Akkawi se difundiera por diferentes países.

Durante siglos, la producción de Akkawi estuvo asociada a métodos artesanales, en los que los pastores de la región producían queso utilizando la leche de cabra y oveja, siguiendo técnicas transmitidas de generación en generación. Sin embargo, a medida que la industria láctea creció en el mundo árabe, el Akkawi comenzó a producirse también con leche de vaca, lo que permitió su expansión en otras regiones fuera del Levante.

Hoy en día, la queso Akkawi sigue siendo uno de los quesos más populares en el mundo árabe, conocido por su sabor suave y su capacidad para adaptarse a diversas preparaciones culinarias.

Características del Queso Akkawi

El queso Akkawi es un queso fresco, semiblandito y con un sabor ligeramente salado que lo hace ideal para diversos usos en la cocina. Este queso destaca por las siguientes características:

  1. Textura: El Akkawi tiene una textura suave y húmeda, que puede variar según el tiempo de maduración. Su consistencia es ligeramente elástica y se deshace fácilmente al morderlo, lo que lo convierte en una excelente opción para ensaladas y como relleno en diferentes platos.

  2. Sabor: Su sabor es suave, cremoso y ligeramente salado. No es un queso que destaque por su acidez o intensidad, lo que lo convierte en un excelente acompañamiento de una amplia variedad de alimentos, tanto dulces como salados.

  3. Color: El queso Akkawi tiene un color blanco puro, lo que lo hace visualmente atractivo en la mesa. Esta característica también contribuye a su versatilidad en la cocina, ya que puede ser combinado con ingredientes de diferentes colores sin alterar la presentación de los platos.

  4. Proceso de Salado: El salado del Akkawi es una de sus características distintivas. Tradicionalmente, el queso es sumergido en salmuera para conservarlo, lo que le da su sabor característico. El nivel de salinidad varía según la región y el productor, por lo que el Akkawi puede ser más o menos salado dependiendo de su preparación.

  5. Versatilidad: Este queso es conocido por su capacidad de adaptarse a diversos platos y formas de preparación. Se utiliza tanto en platos calientes como fríos, y puede ser rallado, desmenuzado o servido en bloques enteros.

Elaboración de la Queso Akkawi

El proceso de fabricación de la queso Akkawi sigue pasos tradicionales, aunque con algunas variaciones dependiendo de la región. A continuación se describe el procedimiento básico para elaborar este delicioso queso:

  1. Recolección de la leche: El primer paso en la producción de Akkawi es la recolección de la leche, que puede ser de vaca, cabra u oveja, aunque la mayoría de las versiones comerciales se hacen con leche de vaca. La leche debe ser fresca y de alta calidad, para garantizar un buen sabor y textura del queso.

  2. Pasteurización: La leche se pasteuriza a una temperatura controlada para eliminar cualquier bacteria dañina y asegurar la seguridad alimentaria. Este paso es esencial, ya que el queso Akkawi es un queso fresco, y debe ser procesado con la mayor higiene posible.

  3. Adición de cuajo y fermentos: Tras la pasteurización, se le añade el cuajo (una enzima que ayuda a coagular la leche) y se dejan reposar durante varias horas hasta que la leche se convierte en cuajada. Este proceso puede durar entre 4 a 6 horas, dependiendo de las condiciones.

  4. Corte de la cuajada: Una vez que la cuajada ha tomado forma, se corta en pequeños trozos para permitir que el suero se separe de la cuajada. Este paso es importante, ya que determina la textura final del queso.

  5. Desuerado y prensado: La cuajada cortada se coloca en moldes, donde se prensa suavemente para eliminar el exceso de suero. Este proceso contribuye a la textura final del queso, que debe ser suave pero no acuosa.

  6. Salado y conservación: El queso es sumergido en una solución de salmuera para darle su sabor característico y conservarlo por más tiempo. El nivel de sal es ajustado según el gusto y la demanda del consumidor.

  7. Maduración (opcional): En algunos casos, el Akkawi se deja madurar durante un corto período de tiempo, lo que permite que desarrolle un sabor más profundo y complejo. Sin embargo, la mayoría del queso Akkawi que se consume es fresco.

Usos Culinarios de la Queso Akkawi

El queso Akkawi es increíblemente versátil en la cocina árabe y se puede encontrar en una amplia variedad de platos. A continuación, exploramos algunos de los usos más comunes de este delicioso queso:

  1. Como aperitivo: El Akkawi se sirve comúnmente como un aperitivo en platos fríos, a menudo acompañado de frutas, nueces, aceitunas y pan. En algunas regiones, se sirve con miel o mermelada para crear una combinación de sabores dulces y salados.

  2. En platos horneados: En la cocina árabe, el Akkawi se utiliza como relleno en una variedad de platos horneados, como manakish (pan árabe) o en pasteles salados. Su textura suave y su capacidad para derretirse lo hacen ideal para estos platillos.

  3. En ensaladas: El Akkawi también es un ingrediente popular en ensaladas frescas. Se puede cortar en cubos pequeños o desmenuzarlo y añadirlo a ensaladas con vegetales frescos como tomates, pepinos, cebollas y hierbas. En algunas recetas, se puede marinar con aceite de oliva, hierbas y especias para darle un sabor adicional.

  4. En platos dulces: Aunque es más común en platos salados, el Akkawi también se puede usar en postres, especialmente en aquellas recetas que combinan queso con sabores dulces. Un ejemplo clásico es el kunafa, un postre árabe hecho con pasta de semolina, jarabe de azúcar y queso Akkawi derretido.

  5. Como acompañamiento en platos principales: El Akkawi puede ser servido junto con platos principales, como guisos o carnes asadas, donde su textura y sabor suave complementan los sabores más intensos de la carne o el arroz.

  6. En bocadillos y wraps: El queso Akkawi también es popular en bocadillos y wraps, donde se combina con hierbas frescas, carnes a la parrilla o ensaladas, creando un snack delicioso y nutritivo.

Conclusión

La queso Akkawi es un tesoro gastronómico de la región árabe, valorado por su sabor suave y versatilidad en la cocina. Desde su origen en Líbano hasta su popularidad en todo el mundo árabe y más allá, el Akkawi sigue siendo un queso fresco y delicioso, utilizado en una amplia variedad de platos. Ya sea en ensaladas, postres, platos horneados o como aperitivo, la queso Akkawi es una excelente manera de disfrutar de los sabores tradicionales del Levante.

Al comprender su historia, proceso de elaboración y usos culinarios, es fácil apreciar la importancia de este queso en la cultura gastronómica árabe y cómo sigue siendo una parte integral de las mesas de muchos hogares en la región.

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