Día 18 de Ramadán: Pollo Cripsy y Ensalada Coleslaw
Durante el mes de Ramadán, las comidas cobran una dimensión especial, tanto por la importancia espiritual de la época como por la necesidad de proporcionar a nuestros cuerpos energía durante el día de ayuno. En este artículo, exploraremos una receta deliciosa y satisfactoria para el día 18 de Ramadán: pollo crujiente (crispy chicken) acompañado de una ensalada coleslaw. Esta combinación no solo es sabrosa, sino que también proporciona una mezcla equilibrada de proteínas, vegetales y carbohidratos, perfecta para el iftar.
El Pollo Cripsy: Un Plato Clásico y Exquisito
El pollo crujiente, también conocido como pollo crispy, es un plato que encanta a casi todo el mundo, especialmente por su textura crujiente por fuera y jugosa por dentro. La receta se basa en un rebozado perfecto que asegura que cada pieza de pollo quede dorada y crocante. Para prepararlo, es esencial seleccionar una pechuga de pollo o muslos de pollo, que son cortes ideales para freír.
Ingredientes para el Pollo Cripsy:
- 4 piezas de muslos de pollo o pechugas deshuesadas y sin piel
- 1 taza de harina de trigo
- 1 taza de pan rallado
- 2 huevos
- 1 cucharadita de sal
- 1 cucharadita de pimienta negra
- 1 cucharadita de ajo en polvo
- 1 cucharadita de cebolla en polvo
- 1 cucharadita de paprika o pimentón dulce
- Aceite para freír (preferiblemente de girasol o canola)
Preparación del Pollo Cripsy:
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Preparar el Pollo:
Lava bien las piezas de pollo y sécalas con toallas de papel para eliminar el exceso de humedad. Esto es importante para que el rebozado se adhiera correctamente. -
Rebozado:
En un tazón grande, mezcla la harina con la sal, pimienta, ajo en polvo, cebolla en polvo y paprika. En otro recipiente, bate los huevos. En un tercer recipiente, coloca el pan rallado. -
Empanar el Pollo:
Pasa cada pieza de pollo primero por la mezcla de harina, asegurándote de cubrirla completamente. Luego, sumérgela en el huevo batido y, finalmente, pásala por el pan rallado. Asegúrate de que cada pieza esté bien empanada para obtener un resultado crujiente. -
Freír el Pollo:
En una sartén grande, calienta suficiente aceite para cubrir el fondo. La temperatura debe estar alta, pero sin que el aceite llegue a humear. Fría el pollo durante unos 8-10 minutos por cada lado, o hasta que el rebozado esté dorado y el pollo cocido por dentro (si usas termómetro de cocina, la temperatura interna del pollo debe ser de 75°C). -
Escurrir el Aceite:
Una vez que el pollo esté dorado y crujiente, sácalo del aceite y colócalo sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.
El pollo cripsy es perfecto cuando se sirve recién hecho, ya que mantiene su textura crocante por fuera y su jugosidad por dentro.
Ensalada Coleslaw: Frescura y Textura
La ensalada coleslaw es una excelente acompañante para el pollo crujiente. Es fresca, ligera y llena de sabores que contrastan perfectamente con la textura del pollo frito. Esta ensalada, originaria de la cocina estadounidense, se caracteriza por su base de repollo y zanahoria, aderezada con una mezcla cremosa y ligeramente ácida.
Ingredientes para la Ensalada Coleslaw:
- 1 repollo pequeño (preferentemente repollo verde)
- 2 zanahorias medianas
- 1 taza de mayonesa
- 1 cucharada de vinagre de manzana
- 1 cucharadita de mostaza (opcional)
- 1 cucharadita de azúcar
- Sal y pimienta al gusto
Preparación de la Ensalada Coleslaw:
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Preparar las Verduras:
Lava bien el repollo y las zanahorias. Corta el repollo en tiras finas o córtalo con una mandolina para obtener cortes uniformes. Ralla las zanahorias en tiras finas para que la textura sea ligera y fácil de masticar. -
Preparar el Aderezo:
En un tazón, mezcla la mayonesa, el vinagre de manzana, la mostaza (si decides usarla) y el azúcar. Agrega sal y pimienta al gusto. Revuelve bien hasta que todos los ingredientes estén completamente integrados. -
Mezclar:
En un tazón grande, coloca el repollo y las zanahorias ralladas. Vierte el aderezo sobre las verduras y mezcla bien hasta que todo esté cubierto por la crema. -
Refrigerar:
Para un sabor más intenso y una mejor textura, refrigera la ensalada durante al menos 30 minutos antes de servirla. Esto permite que los sabores se integren y la ensalada esté bien fría.
La ensalada coleslaw es un acompañante refrescante, que ofrece un contraste ideal al pollo frito y contribuye a equilibrar el plato con su frescura.
La Combinación Perfecta
El pollo crujiente y la ensalada coleslaw se complementan a la perfección en el iftar, proporcionando una combinación equilibrada de proteínas, vegetales y grasas saludables. El crujido del pollo, junto con la suavidad cremosa y la frescura de la ensalada, crea una experiencia gastronómica que no solo es deliciosa, sino también reconfortante después de un día de ayuno.
Beneficios Nutricionales de la Combinación
El pollo crujiente aporta una buena fuente de proteínas, necesarias para el mantenimiento y reparación muscular, especialmente después de un día largo de ayuno. Las zanahorias en la ensalada coleslaw proporcionan vitamina A, que es vital para la salud ocular, mientras que el repollo es rico en fibra y vitamina C, que ayuda a fortalecer el sistema inmunológico. El aderezo, aunque cremoso, puede prepararse con mayonesa baja en grasa para reducir su contenido calórico.
Sugerencias para Mejorar el Plato
- Variedad en el Pollo: Puedes agregar especias adicionales al rebozado para darle un toque más personal. Algunas opciones populares incluyen el chile en polvo o las hierbas secas como el tomillo o el romero.
- Ensalada Variada: Si deseas hacer la ensalada más colorida y nutritiva, puedes agregar otros ingredientes como manzana verde, pasas o nueces, lo que le dará un toque de dulzura y crocancia.
- Salsas: Para darle más sabor al pollo crujiente, puedes acompañarlo con salsas como la barbacoa, miel y mostaza, o una salsa picante.
Conclusión
El pollo cripsy con ensalada coleslaw es una opción ideal para el iftar del día 18 de Ramadán. Esta receta es fácil de preparar, deliciosa y equilibrada, proporcionando una comida completa y satisfactoria para romper el ayuno. Con su combinación de texturas crujientes, frescas y cremosas, este plato no solo es un deleite para el paladar, sino que también es una manera saludable de nutrir el cuerpo después de un largo día de ayuno.
