Lincoln MKX 2016-2018: Un SUV de lujo con una nueva visión
El Lincoln MKX de segunda generación, presentado en el Salón Internacional del Automóvil de Norteamérica a principios de 2015, marcó un hito en la evolución del fabricante estadounidense. Con un diseño más moderno, tecnología avanzada y un rendimiento mejorado, este SUV de lujo se lanzó como modelo 2016 y rápidamente se destacó en su segmento. A continuación, exploraremos las características, especificaciones y las razones por las que el Lincoln MKX 2016-2018 sigue siendo un referente en el mundo de los SUV de lujo.
Un cambio de paradigma en la plataforma
La segunda generación del Lincoln MKX se basó en la plataforma Ford CD4, que también se utiliza en vehículos como el Ford Mondeo europeo y algunos sedanes de Lincoln. Esta plataforma compartida con el Ford Edge permitió a Lincoln ofrecer un SUV más refinado y robusto. Gracias a esta base, el MKX 2016-2018 podía competir con otros SUV grandes en el mercado, ofreciendo una experiencia de conducción más suave, estable y lujosa.
La adopción de esta plataforma también permitió incorporar una serie de tecnologías y características que marcaron la diferencia con respecto a su predecesor. Desde el principio, el Lincoln MKX se presentó como un SUV más elegante, con detalles de diseño que lo hacían fácilmente reconocible como parte de la familia Lincoln, como su distintiva parrilla delantera de doble ala que se expandía hacia los guardabarros y que incorporaba las luces delanteras.
Innovación tecnológica
El MKX 2016-2018 no solo destacó por su diseño, sino también por las innovaciones tecnológicas que Lincoln introdujo en este modelo. Entre las características más destacadas se encontraba el sistema de dirección adaptativa, que ajustaba la sensibilidad de la dirección según la velocidad y las condiciones de conducción, ofreciendo una mayor precisión y confort al volante. Además, el MKX ofrecía los faros LED adaptativos opcionales, una característica que mejoraba la visibilidad al ajustar la dirección de los faros en función de la curva del camino.
Los faros LED también se complementaban con una serie de luces traseras que mejoraban la visibilidad y la estética del vehículo. Además, el MKX contaba con espejos retrovisores equipados con lámparas que proyectaban un mensaje de bienvenida hacia el suelo cuando el conductor se encontraba a una distancia de 3 metros (9 pies) del coche. Estas características, que no solo mejoraban la seguridad, sino también la experiencia del usuario, mostraron el compromiso de Lincoln con la innovación en cada detalle.
Interior lujoso y opciones de personalización
El interior del Lincoln MKX 2016-2018 ofreció una experiencia de lujo incomparable. Con materiales de alta calidad, acabados meticulosos y opciones de personalización, el MKX se posicionó como un competidor serio en el segmento de los SUV de lujo. Desde asientos de cuero de primera calidad hasta una consola central de diseño elegante, cada elemento del interior estaba pensado para ofrecer una experiencia premium.
Una de las críticas que recibió este modelo, sin embargo, fue su sistema de infoentretenimiento. El Lincoln MKX 2016-2018 estaba equipado con el sistema Sync 2, que en ese momento no era compatible con Android Auto o Apple CarPlay, tecnologías que ya estaban siendo adoptadas por otros vehículos de lujo. El Sync 2 se conectaba a los smartphones únicamente mediante una aplicación dedicada, lo que limitaba la interacción con dispositivos móviles de última generación. A pesar de esto, el MKX seguía ofreciendo una experiencia de conducción de primer nivel gracias a su intuitiva interfaz y opciones de conectividad.
Desempeño y motorización
En cuanto a la motorización, el Lincoln MKX 2016-2018 ofreció una variedad de opciones de motores, siendo uno de los más destacados el motor 2.7L EcoBoost V6. Este motor turboalimentado de 6 cilindros, con una cilindrada de 2699 cm³, entregaba una impresionante potencia de 335 caballos de fuerza (246.4 kW) a 3000 revoluciones por minuto (RPM). Además, su torque de 380 lb-ft (515 Nm) ofrecía una excelente capacidad de aceleración y potencia, tanto para viajes largos por carretera como para maniobras urbanas. Este motor estaba emparejado con una transmisión automática de 6 velocidades, que permitía un cambio de marchas suave y eficiente.
El MKX 2016-2018 estaba disponible con tracción delantera (FWD) de serie, mientras que la tracción en las cuatro ruedas (AWD) estaba disponible como opción. Esto ofreció a los conductores la flexibilidad de elegir el tipo de tracción que mejor se adaptara a sus necesidades, ya sea para condiciones de carretera más desafiantes o para una conducción más eficiente en rutas urbanas.
Diseño exterior y dimensiones
El diseño exterior del MKX 2016-2018 se distinguió por su imponente presencia y elegancia. Con una longitud de 4826 mm (190 pulgadas), un ancho de 1935 mm (76.2 pulgadas) y una altura de 1681 mm (66.2 pulgadas), el MKX era un SUV grande y robusto que transmitía una sensación de lujo y sofisticación. La distancia entre ejes de 2850 mm (112.2 pulgadas) proporcionaba una gran estabilidad en la carretera y un interior espacioso.
El vehículo estaba equipado con llantas de tamaño 245/60 R18, lo que contribuyó a su estabilidad y tracción. El sistema de frenos ventilados en las ruedas delanteras y discos en las traseras aseguraban un rendimiento de frenado confiable y eficiente, incluso en situaciones de alta velocidad o durante el frenado brusco.
Economía de combustible y emisiones
En términos de eficiencia de combustible, el Lincoln MKX 2016-2018 mostró un rendimiento bastante competitivo para un SUV de su tamaño. Con un consumo combinado de 11.2 litros cada 100 km (21 mpg US) y un consumo en ciudad de 13.8 litros cada 100 km (17 mpg US), el MKX logró equilibrar la potencia con la eficiencia. Esto lo convertía en una opción atractiva para los conductores que deseaban un vehículo grande sin sacrificar demasiado en términos de economía de combustible.
En cuanto a las emisiones de CO2, las cifras exactas no fueron especificadas, pero el rendimiento del motor turboalimentado y la tecnología de inyección directa ayudaron a optimizar la eficiencia general del vehículo, manteniendo las emisiones en niveles razonables para un SUV de lujo de este tamaño.
Conclusión
El Lincoln MKX 2016-2018 es una opción sobresaliente en el competitivo segmento de los SUV de lujo. Con un diseño atractivo, un motor potente y una serie de innovaciones tecnológicas, este modelo estableció un nuevo estándar para la marca Lincoln y consolidó su posición en el mercado de los vehículos premium. Aunque algunas de sus características, como el sistema de infoentretenimiento, podrían haberse beneficiado de una actualización, el MKX sigue siendo un SUV altamente valorado por su confort, rendimiento y lujo.
Si estás buscando un SUV que combine elegancia, potencia y tecnología avanzada, el Lincoln MKX 2016-2018 sigue siendo una excelente elección, tanto para aquellos que buscan una experiencia de conducción sofisticada como para quienes desean un vehículo espacioso y bien equipado para toda la familia.
