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Infiniti Q45: Lujo y rendimiento

Infiniti Q45 1989-1996: El nacer de una leyenda en el mercado de autos de lujo

El Infiniti Q45 fue un vehículo que marcó el inicio de una nueva era para la marca japonesa Infiniti, una división de lujo de Nissan. Introducido en el mercado estadounidense en 1989, el Q45 se posicionó como el modelo insignia de la marca y tenía como objetivo competir directamente con otros vehículos de lujo de la época, como el Lexus LS400. Sin embargo, a pesar de ser un vehículo completamente nuevo para el mercado norteamericano, el Q45 no fue un diseño totalmente original. De hecho, su base era el Nissan Cedric Cima, un sedán de lujo japonés que fue rebautizado y adaptado para el mercado estadounidense.

A lo largo de su producción desde 1989 hasta 1996, el Q45 se destacó por varias características distintivas que lo hicieron único en su segmento. Aunque compartía elementos con el Cedric Cima, Infiniti se encargó de darle un diseño que no solo tuviera un aspecto elegante, sino también un rendimiento sobresaliente, algo que se convirtió en una de sus grandes virtudes.

Diseño exterior: un enfoque único

Una de las características más llamativas del Infiniti Q45 fue su diseño exterior. Mientras que muchos autos de lujo de la época presentaban una parrilla frontal tradicional, el Q45 optó por un enfoque distinto. El modelo carecía de una parrilla convencional, lo que le daba un aspecto más limpio y moderno. En su lugar, el frente del vehículo estaba compuesto por una fascia plana con un gran emblema en el centro. Esta decisión estética rompió con las convenciones de los sedanes de lujo de la época, destacándose por su originalidad.

Otro detalle de diseño interesante fue el uso de una entrada de aire ubicada en la parte inferior del parachoques delantero. Esta apertura no solo cumplía una función estética, sino que ayudaba a refrigerar el motor, mostrando el enfoque funcional de Infiniti en la construcción del Q45. El diseño de las líneas curvas en los márgenes y la ventana trasera inclinada proporcionaban al vehículo una apariencia más deportiva y dinámica en comparación con algunos de sus competidores, como el Lexus LS400, el cual compartía el mismo mercado objetivo.

En términos de dimensiones, el Q45 era un sedán grande, lo que le otorgaba una presencia imponente en la carretera. Con una longitud de 5075 mm, un ancho de 1826 mm y una altura de 1430 mm, el Q45 era un vehículo robusto, pero con un diseño que equilibraba perfectamente las proporciones para no perder su elegancia.

Interior: lujo y confort

En el interior, Infiniti también hizo un esfuerzo considerable para ofrecer un ambiente de lujo y comodidad para sus ocupantes. El Q45 estaba diseñado para proporcionar suficiente espacio para cuatro adultos, gracias a su amplia distancia entre ejes de 2880 mm. El diseño del habitáculo era moderno, con un tablero curvado que se orientaba ligeramente hacia el conductor, lo que creaba una sensación de inmersión y enfoque en la experiencia de manejo.

Los asientos delanteros eran de tipo bucket, con un alto nivel de sujeción lateral, lo que garantizaba un confort superior durante los viajes largos. Sin embargo, en la parte trasera, el diseño no fue tan amigable para los pasajeros que se sentaban en el centro. El túnel central elevado hacía casi imposible usar ese asiento de manera cómoda, pero por otro lado, el Q45 compensaba este detalle con un maletero de gran capacidad, que resultaba ser bastante práctico para los viajes largos.

Potencia y rendimiento: motor V8

Bajo el capó, el Infiniti Q45 contaba con un motor V8 de 4.5 litros, que ofrecía una potencia de 278 caballos de fuerza a 6000 rpm. Este motor era capaz de generar un torque de 396 Nm a 4000 rpm, lo que otorgaba al Q45 una aceleración sorprendente para su tamaño y peso. A pesar de ser un sedán de lujo, el Q45 podía acelerar de 0 a 100 km/h en tan solo 6.7 segundos, una cifra impresionante en esa época, que lo posicionaba como un vehículo con un rendimiento deportivo más allá de sus capacidades de lujo.

El motor V8 estaba acoplado a una transmisión automática de cuatro velocidades, que proporcionaba una conducción suave y sin esfuerzos. El Q45 también presentaba tracción trasera, lo que mejoraba aún más su comportamiento dinámico en la carretera, especialmente en curvas y maniobras de alta velocidad. El sistema de frenos ventilados en las ruedas delanteras y discos en las traseras aseguraban una excelente capacidad de frenado, incluso en condiciones de conducción exigentes.

A nivel de consumo de combustible, el Q45 no era un vehículo especialmente económico, pero sus cifras eran aceptables para su segmento. Ofrecía un rendimiento de 15 millas por galón en ciudad (15.7 L/100 km) y 17 millas por galón en carretera (13.8 L/100 km). Si bien no era un modelo especialmente eficiente en términos de consumo, sus prestaciones deportivas y su enfoque de lujo lo justificaban.

Tecnología y características de seguridad

A lo largo de su producción, el Infiniti Q45 fue mejorando en términos de tecnología y características de seguridad. En los primeros años de producción, el vehículo ofrecía una serie de características de confort y conveniencia, como asientos eléctricos, climatización automática, un sistema de audio de alta calidad y materiales de interiores de lujo como madera y cuero.

En cuanto a seguridad, el Q45 estaba equipado con características avanzadas para la época, como frenos de disco ventilados, control de tracción y sistemas de suspensión diseñados para ofrecer una conducción estable y segura. No obstante, en términos de tecnología de seguridad activa y pasiva, el Q45 no contaba con los mismos avances que los modelos de lujo actuales, pero para su tiempo, era un vehículo bien dotado.

Conclusión

El Infiniti Q45, que se produjo entre 1989 y 1996, fue un vehículo que marcó un hito en la historia de Infiniti y su entrada en el mercado estadounidense de autos de lujo. Aunque compartía muchas características con el Nissan Cedric Cima japonés, Infiniti se encargó de ofrecer un diseño distintivo, una gran potencia y un nivel de confort y lujo que rivalizaba con los mejores sedanes de lujo de la época.

El Q45 logró una combinación única de elegancia, rendimiento deportivo y lujo, lo que lo convirtió en un modelo destacado en su segmento. Si bien el Q45 no alcanzó el mismo nivel de popularidad que otros modelos contemporáneos, como el Lexus LS400, su legado como el primer sedán de lujo insignia de Infiniti sigue siendo relevante en la historia de la marca. Con un diseño atrevido y un motor potente, el Infiniti Q45 sentó las bases para los futuros modelos de la marca, que continuarían con la tradición de ofrecer vehículos de lujo innovadores y de alto rendimiento.

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