HYUNDAI Trajet 2004-2008: Un análisis completo de un modelo que llegó tarde al mercado
El mercado de los vehículos familiares ha sido siempre un campo de competencia intensa. Sin embargo, durante la década de los 90 y principios de los 2000, la tendencia de los vehículos multivan o minivanes comenzó a ganar terreno en todo el mundo, especialmente en mercados europeos y asiáticos. En este contexto, Hyundai, una marca coreana con ambiciones globales, decidió lanzar su modelo Trajet. A pesar de que se trataba de un minivan de siete plazas con muchas características atractivas, el Trajet de 2004-2008 llegó tarde al juego, lo que impidió que tuviera el éxito esperado.
Origen y evolución del Hyundai Trajet
La historia del Hyundai Trajet comienza a fines de los años 90, cuando Hyundai se dio cuenta de que, a pesar de su éxito con sedanes y otros modelos, estaba perdiendo terreno en el creciente mercado de las minivanes. En 1999, la marca coreana lanzó el Trajet, un vehículo que, aunque basado en la plataforma del Hyundai Sonata, mostraba un diseño más funcional, orientado a cubrir las necesidades de los conductores y familias que requerían más espacio y versatilidad.
El modelo de 2004, que es el objeto de este análisis, fue una actualización significativa de este vehículo, con un diseño exterior más moderno y un interior adaptado para mejorar la comodidad de los pasajeros y su capacidad de carga. Sin embargo, este esfuerzo llegó en un momento en que otros competidores, como Chrysler, Ford y Honda, ya habían consolidado su presencia en el segmento de las minivanes.
Diseño y características del exterior
El Hyundai Trajet 2004-2008 tenía un diseño robusto y práctico, con una longitud de 4699 mm, un ancho de 1839 mm y una altura de 1760 mm. A pesar de sus dimensiones, no era un vehículo excesivamente grande, lo que lo hacía adecuado para maniobrar en entornos urbanos, especialmente en mercados como el europeo y el asiático, donde el tamaño de los coches es una consideración importante.
El diseño exterior se caracterizaba por una parrilla delantera con rejillas horizontales y unos faros delgados y alargados, lo que le otorgaba una apariencia distinta en comparación con otras minivanes de la época. A pesar de estas características distintivas, el diseño no dejó de seguir las tendencias del momento, y es claro que Hyundai intentó darle un toque más moderno y atractivo al modelo.
En cuanto a las puertas, el Trajet optó por seguir la tradición de las puertas convencionales, a diferencia de otros competidores como Chrysler o Ford, que apostaron por las puertas corredizas. Si bien este enfoque no era necesariamente mejor o peor, la elección de puertas convencionales fue un aspecto que lo diferenciaba de algunos modelos más familiares y fáciles de usar en entornos urbanos.
Interior y capacidad de pasajeros
Uno de los aspectos más atractivos del Hyundai Trajet era su interior. El vehículo estaba diseñado para albergar hasta siete pasajeros, lo que lo convertía en una opción popular entre familias grandes o personas que necesitaban un transporte versátil para viajes largos. El espacio interior era bastante adecuado, con suficiente espacio para los pasajeros en las tres filas de asientos. En cuanto al confort, el Trajet se esforzaba por ofrecer una experiencia agradable a bordo, con materiales de calidad decente y una disposición práctica para los usuarios.
El diseño del tablero era un tanto simplificado, con inspiración claramente tomada de los fabricantes de automóviles estadounidenses. Una de las características que más llamaba la atención era la colocación del selector de cambios en el volante, lo que dejaba espacio para un centro de control más corto y un diseño interior sin una consola central tan prominente.
El acceso a las plazas traseras, especialmente en la tercera fila, podría haber sido un inconveniente en algunos modelos de minivanes de la época, pero el Trajet ofrecía un interior razonablemente accesible para los pasajeros.
Motorización y rendimiento
El Hyundai Trajet 2004-2008 se ofreció con una variedad de motorizaciones para satisfacer las diferentes demandas de los mercados en los que se vendía. Las versiones más comunes del modelo eran las que contaban con motores de gasolina de 2.0 litros, que brindaban un buen equilibrio entre eficiencia de combustible y potencia. Esta versión en particular estaba equipada con un motor de 140 caballos de fuerza (103 kW) a 6000 revoluciones por minuto, lo que permitía que el Trajet tuviera un rendimiento respetable, adecuado tanto para viajes largos como para uso urbano.
El motor 2.0i 4AT, que fue uno de los más populares, estaba asociado a una caja de cambios automática de 4 velocidades. Aunque la potencia era más que suficiente para la mayoría de los conductores, los modelos de gama más alta ofrecían versiones con motores más potentes, como el 2.7 V6, que proporcionaban una mayor capacidad de aceleración y velocidad. Sin embargo, estos motores de mayor cilindrada no eran tan populares en mercados como Europa, donde la eficiencia de combustible era más apreciada.
Una de las características que más se destacaba en el Trajet era su eficiente consumo de combustible, especialmente en la versión diesel de 2.0 litros. Los conductores que buscaban una minivan con buen rendimiento de combustible encontraron en el Trajet una opción atractiva, ya que los modelos de gasóleo tenían una excelente autonomía en viajes largos.
Manejo y confort
El Trajet estaba diseñado para ofrecer un manejo relativamente suave y cómodo, especialmente en viajes largos o desplazamientos familiares. Si bien no era un vehículo deportivo ni diseñado para una conducción de alto rendimiento, cumplía su función como vehículo familiar con una conducción cómoda y estable. La suspensión estaba configurada para brindar una experiencia más relajada en carreteras irregulares o durante viajes largos, y su dirección asistida ayudaba a maniobrar el vehículo con facilidad, aunque la sensación al volante era más bien de confort que de agilidad.
En cuanto a la calidad de construcción y los acabados, el Hyundai Trajet estaba bien equipado para ser una minivan asequible. No ofrecía el lujo o las características premium de algunos modelos de marcas como Mercedes-Benz o Toyota, pero su relación calidad-precio era uno de sus puntos fuertes.
Competencia y la llegada tarde al mercado
Aunque el Trajet tenía muchas cualidades atractivas, llegó tarde al mercado de las minivanes. La competencia en ese segmento ya estaba muy consolidada, con modelos como el Chrysler Voyager, el Ford Galaxy o el Honda Odyssey dominando las ventas. Además, los fabricantes de vehículos japoneses y estadounidenses ya habían perfeccionado sus diseños, ofreciendo características como las puertas corredizas automáticas, lo que hacía que las minivanes competidoras fueran más fáciles de usar en entornos urbanos y en situaciones de aparcamiento.
Por otro lado, el segmento de minivanes también comenzó a ser desplazado a medida que las SUV (vehículos deportivos utilitarios) ganaban popularidad, especialmente en mercados como el estadounidense. Las minivanes, que anteriormente habían sido consideradas como la mejor opción para familias grandes, comenzaron a ser vistas como vehículos menos modernos, y el Trajet se vio atrapado en esta transición.
Conclusión
El Hyundai Trajet 2004-2008 fue un intento valiente de Hyundai para entrar en el competitivo mercado de las minivanes. Aunque sus características de diseño, capacidad de pasajeros y motorizaciones fueron bastante buenas para su época, el modelo llegó demasiado tarde al mercado. En un momento en el que las minivanes estaban perdiendo popularidad frente a las SUV y otros fabricantes ya habían establecido su dominio, el Trajet no logró capturar la atención del mercado masivo.
No obstante, el Trajet sigue siendo una opción a considerar para quienes buscan un vehículo familiar asequible con buen rendimiento de combustible y una capacidad respetable de pasajeros. A pesar de que no se convirtió en un líder de ventas, fue un testimonio del compromiso de Hyundai por adaptarse a las demandas del mercado y seguir compitiendo en un segmento muy competitivo.
