Honda Ridgeline 2021-Presente: Un análisis completo de la evolución del pick-up más versátil de Honda
El Honda Ridgeline, un pick-up que ha logrado destacarse por su enfoque diferente en un segmento dominado por modelos robustos y con diseños más agresivos, ha continuado su evolución con la versión de 2021, que marca un cambio importante en cuanto a estilo y presencia en la carretera. A pesar de no incorporar actualizaciones mecánicas significativas en términos de motorización o rendimiento, el modelo 2021 se presenta con una estética renovada que refuerza la imagen de un vehículo más robusto y acorde con las expectativas de los consumidores estadounidenses. Este artículo ofrece un análisis exhaustivo de las características, el diseño y las mejoras del Honda Ridgeline 2021, en comparación con sus versiones anteriores.
La evolución del diseño: Un Ridgeline más agresivo
Desde su lanzamiento inicial en 2005, el Honda Ridgeline ha sido conocido por ofrecer una alternativa más suave y utilitaria dentro del segmento de los pick-ups, diferenciándose de sus competidores por su carrocería monocasco, similar a la de un automóvil, en lugar de la estructura de chasis de escalera convencional de los demás modelos en el mercado. Esto le ha permitido combinar la comodidad de un automóvil con la funcionalidad de un pick-up, convirtiéndolo en una opción popular para aquellos que no requieren la capacidad de carga extrema de los modelos tradicionales.
Con el modelo 2021, Honda ha tomado la decisión de enfocar los esfuerzos de rediseño en mejorar la estética del Ridgeline, buscando atraer a un público más amplio, en particular a los consumidores estadounidenses, quienes suelen preferir vehículos con una presencia más robusta y deportiva. De esta manera, el Ridgeline 2021 se aleja de su apariencia más suave de modelos anteriores y adopta un diseño más “agresivo” y de “camión duro”.
El frontal del Ridgeline 2021 es una de las principales áreas de enfoque en cuanto a diseño. El capó fue rediseñado para proporcionar un perfil más dominante y agresivo, mientras que la parrilla se agrandó y se volvió más audaz. Los faros, por su parte, se estilizaron, adoptando una forma más alargada y moderna, lo que refuerza la apariencia de robustez. Los guardabarros también recibieron un tratamiento renovado, contribuyendo a la sensación general de mayor fortaleza.
Uno de los cambios más notables es el nuevo sistema de escape dual, que no solo mejora el rendimiento del vehículo, sino que también contribuye a su estética más deportiva. El diseño del paragolpes delantero también fue modificado, incorporando nuevas aberturas funcionales que ayudan a optimizar la aerodinámica y la refrigeración, lo que es esencial en vehículos de este tipo.
Además de estos cambios, Honda presentó el paquete de apariencia Honda Performance Development (HPD, por sus siglas en inglés), que aporta un toque de exclusividad con una parrilla única, faldones de guardabarros negros y ruedas de aleación en color bronce. Este paquete está disponible para quienes buscan un Ridgeline con un estilo más agresivo y personalizado.
Un interior más refinado y tecnológico
Aunque el exterior del Ridgeline 2021 recibió la mayor atención, el interior del vehículo también se beneficia de algunas mejoras notables. En términos de materiales, Honda mantuvo el nivel de calidad visto en el modelo anterior, pero se incorporaron detalles nuevos, como la costura contrastante de color, que ahora viene de serie en todos los niveles de acabado.
La actualización más destacada en el interior es el sistema de infoentretenimiento, que ahora cuenta con gráficos más modernos y una respuesta más rápida. Honda también incluyó un botón físico para el control de volumen, lo que agradó a los usuarios que prefieren una interfaz más tradicional en lugar de los controles completamente táctiles. El sistema es compatible con Apple CarPlay y Android Auto, lo que permite a los conductores integrar fácilmente sus teléfonos inteligentes con la pantalla central.
Además, el Ridgeline 2021 mantiene su reputación de ser un vehículo cómodo para los pasajeros, con un interior espacioso y bien insonorizado, ideal para viajes largos y trayectos urbanos.
Motor y rendimiento: Sin cambios significativos, pero con excelente desempeño
A pesar de que el diseño y las características interiores fueron las principales áreas de mejora para el Ridgeline 2021, Honda mantuvo la motorización y la configuración mecánica de las versiones anteriores. El Ridgeline sigue utilizando el motor V6 de 3.5 litros, capaz de generar 280 caballos de fuerza. Este motor es acoplado a una transmisión automática de 9 velocidades, que ofrece una conducción suave y eficiente tanto en carretera como fuera de ella.
El modelo 2021 también mantiene la opción de tracción delantera estándar o el sistema de tracción total inteligente (iVTM) que ofrece una mayor versatilidad para quienes necesitan un rendimiento superior en condiciones de conducción difíciles, como terrenos resbaladizos o lluviosos.
El Ridgeline ha sido reconocido por su capacidad de remolque decente, que alcanza hasta 5,000 libras (aproximadamente 2,268 kg), lo que lo convierte en una opción adecuada para aquellos que buscan un pick-up con una capacidad de carga moderada, pero con la comodidad y la maniobrabilidad de un SUV.
Comodidad y seguridad
El Honda Ridgeline 2021 sigue siendo un vehículo cómodo para la conducción diaria, con una suspensión independiente en las cuatro ruedas que contribuye a una experiencia de conducción más suave y menos vibrante en comparación con otros pick-ups de tamaño mediano. Esto es especialmente ventajoso cuando se circula por carreteras pavimentadas o en condiciones de tráfico intenso.
En términos de seguridad, el modelo 2021 viene equipado con una serie de características avanzadas, como el Honda Sensing, que incluye asistencia para el mantenimiento de carril, control de crucero adaptativo y frenado automático en ciudad. Estas tecnologías se complementan con una sólida calificación en las pruebas de choque, lo que refuerza la reputación del Ridgeline como un vehículo seguro para conducir.
Conclusión
El Honda Ridgeline 2021, a pesar de no incorporar cambios mecánicos significativos, representa una evolución importante en términos de diseño y estilo. Con un enfoque renovado hacia un look más agresivo y robusto, Honda ha logrado atraer a un público más amplio sin sacrificar las características que han hecho de este modelo una opción popular en el segmento de los pick-ups medianos.
Su combinación de comodidad, rendimiento eficiente, y características de seguridad avanzadas lo convierte en un vehículo altamente competitivo en su clase. Aunque no es el pick-up más potente ni el de mayor capacidad de carga, el Ridgeline sigue siendo una opción atractiva para quienes buscan un vehículo versátil, funcional y con un toque de lujo.
En resumen, el Honda Ridgeline 2021 sigue siendo un pick-up que se destaca por su diseño único, su calidad interior y sus características tecnológicas, lo que lo convierte en una excelente opción para aquellos que buscan un vehículo práctico y sofisticado para el día a día.
