HOLDEN Commodore Wagon 2015-2017: Un Último Adiós al Icono Australiano
La historia del HOLDEN Commodore Wagon es un relato de innovación, adaptación y finalmente, despedida. Entre 1997 y 2017, la gama Commodore de Holden representó no solo un ícono para los australianos, sino también un ejemplo de resistencia y longevidad en un mercado cada vez más globalizado. En 2015, con la introducción de la versión facelifted para el modelo VFII, se marcó un punto culminante en la saga de este vehículo. Aunque la noticia del cierre de la planta de Holden en Elizabeth ya era conocida, el Commodore Wagon 2015-2017 se convirtió en el último adiós de un modelo que, a pesar de la inevitable despedida, dejó una huella profunda en el mercado local.
Un Último Facelift: Un Look Renovado y Mejoras Técnicas
El facelift de 2015 para el Commodore Wagon VFII no solo se limitó a ofrecer una mejora estética, sino que también incorporó diversas mejoras técnicas que lo posicionaron como una opción atractiva para los consumidores, a pesar de los vientos de cambio que soplaban desde el cierre de la planta de producción. Con más de tres décadas de historia, el Commodore Wagon seguía siendo un modelo robusto y bien adaptado a las exigencias del mercado australiano.
Uno de los cambios más notables en la parte exterior del vehículo fue la incorporación de una nueva fascia frontal. Para la versión Redline, que representaba la variante más deportiva y potente, se agregó un kit aerodinámico mejorado. Este nuevo diseño no solo ofrecía un aspecto más moderno y agresivo, sino que también mejoraba la eficiencia del flujo de aire. Los ductos de ventilación en el capó ayudaban a liberar el aire caliente del compartimento del motor, mientras que los ventiladores laterales en el parachoques delantero redirigían el aire a los costados, lo que no solo mejoraba la aerodinámica, sino que también ayudaba a mantener las temperaturas del motor bajo control.
El diseño de las luces traseras también recibió un tratamiento de tecnología LED, lo que no solo mejoraba la estética, sino que también aumentaba la eficiencia y la visibilidad del vehículo en condiciones de poca luz.
Un Interior Que Conservaba la Esencia del Commodore
A pesar de las actualizaciones exteriores, el interior del Commodore Wagon VFII permaneció en gran medida fiel a la tradición del modelo. Sin embargo, se realizaron pequeños ajustes que mejoraron la experiencia general. Se introdujeron mejoras en los acabados de la cabina y una mayor integración tecnológica para mantenerse al día con las expectativas del mercado moderno.
En la versión SS, la mejora más destacada fue la incorporación de un sistema bimodal en el escape. Este sistema permitía modificar el sonido del escape, ofreciendo una experiencia más envolvente y emocionante al conducir, con un aumento de 10 decibelios en la cabina. Esto resultaba particularmente impactante en la versión Wagon, donde la ausencia de una pared divisoria entre el maletero y el interior hacía que el sonido del motor y el escape fuera aún más prominente, creando una experiencia de conducción más visceral.
Motor y Desempeño: El Poder del LS3
Una de las modificaciones más significativas de la versión facelifted fue la introducción del motor LS3 de 6.2 litros, reemplazando al anterior motor V8 de 6.0 litros. Este cambio fue recibido con entusiasmo por los fanáticos de los coches deportivos, ya que el nuevo motor ofrecía una mayor potencia y un rendimiento mejorado. El motor V8 LS3 producía 252 caballos de fuerza (185.4 kW) a 6700 RPM, lo que permitía al Commodore Wagon alcanzar una velocidad máxima de 237 km/h (147 mph).
El rendimiento no solo se limitaba a la velocidad. La aceleración de 0 a 100 km/h se lograba en 7.2 segundos, una cifra impresionante para un vehículo de este tamaño y categoría. Esta potencia se transmitía de manera eficiente gracias a la transmisión automática de seis velocidades, que ofrecía una conducción suave pero emocionante.
El sistema de tracción trasera (RWD) también contribuía a una experiencia de conducción más dinámica, permitiendo al Commodore Wagon tomar las curvas con una mayor agilidad y control.
Características Técnicas y Especificaciones
El HOLDEN Commodore Wagon 2015-2017 no solo destacó por su rendimiento, sino también por sus características técnicas y dimensiones, que lo hacían adecuado tanto para la conducción urbana como para los viajes largos.
Motor y Desempeño:
- Motor: V6 de 3.0 litros, inyección directa.
- Potencia: 252 caballos de fuerza (185.4 kW) a 6700 RPM.
- Par máximo: 214 lb-ft (290 Nm) a 2600 RPM.
- Transmisión: Automática de 6 velocidades.
- Velocidad máxima: 147 mph (237 km/h).
- Aceleración (0-100 km/h): 7.2 segundos.
Dimensiones y Capacidades:
- Longitud: 4920 mm (193.7 in).
- Anchura: 1897 mm (74.7 in).
- Altura: 1473 mm (58 in).
- Distancia entre ejes: 2916 mm (114.8 in).
- Volumen del maletero: 496 L (17.5 cuFT).
- Peso sin carga: 1620 kg (3571 lbs).
- Despeje del suelo: 119 mm (4.7 in).
- Tamaño de llantas: 225/60 R 16 V.
- Consumo combinado: 10.5 L/100 km (22.4 mpg US).
- Capacidad del tanque de combustible: 62.1 L (16.4 galones).
Sistema de Frenos y Suspensión:
- Delante: Discos ventilados.
- Atrás: Discos ventilados.
- Suspensión: Independiente en las cuatro ruedas, con una configuración adaptada para la comodidad y el control.
Despedida de un Ícono: El Fin de la Producción Local
En 2017, el Commodore Wagon y toda la línea Commodore llegaron a su fin. El cierre de la planta de Holden en Elizabeth marcó el cierre de una era para la marca. La decisión de GM de descontinuar la producción local de automóviles en Australia fue un golpe para muchos fanáticos de los vehículos de la marca, que lamentaron la desaparición de uno de los modelos más emblemáticos de la industria automotriz australiana.
A pesar de la despedida, el Commodore Wagon 2015-2017 sigue siendo recordado con cariño por muchos conductores y entusiastas de los autos en Australia. Su diseño práctico y elegante, junto con su impresionante motor y su capacidad de carga, lo convirtieron en una opción popular entre las familias y los conductores que necesitaban un vehículo versátil y potente.
Conclusión: Un Modelo que Deja Huella
El HOLDEN Commodore Wagon 2015-2017 representó el último suspiro de un modelo que había sido parte integral de la industria automotriz australiana durante más de 30 años. Con sus mejoras estéticas y técnicas, este modelo no solo cerró con broche de oro una era, sino que dejó una marca indeleble en los corazones de quienes lo condujeron. Aunque el Commodore Wagon ya no está en producción, su legado perdurará como un símbolo de lo que fue el automóvil familiar australiano por excelencia.