Atlético Mineiro, conocido popularmente como «Galo», es uno de los clubes más tradicionales y respetados de Brasil. Fundado el 25 de marzo de 1908 en la ciudad de Belo Horizonte, estado de Minas Gerais, ha experimentado una trayectoria rica en títulos, jugadores icónicos y una apasionada hinchada. Este club, que ha sido uno de los pilares del fútbol brasileño, tiene una historia llena de triunfos, momentos dramáticos y un vínculo inquebrantable con su afición.
Fundadores y primeros pasos (1908-1929)
El Atlético Mineiro fue fundado por un grupo de jóvenes que querían formar un equipo para practicar el fútbol, deporte que comenzaba a ganar popularidad en Brasil a principios del siglo XX. El club fue creado por 22 estudiantes de Belo Horizonte bajo el nombre de Athletic Club, pero posteriormente adoptaron el nombre actual.
Al principio, el Atlético jugaba de manera amateur, enfrentándose a otros equipos locales. En esa época, el fútbol en Brasil aún no era una actividad profesional, y los jugadores lo practicaban por pura pasión. El club comenzó a destacar rápidamente en las competiciones regionales, y en 1915, ganó su primer título, el Campeonato Mineiro.
Durante estas dos primeras décadas, Atlético Mineiro consolidó su posición como uno de los principales clubes de Minas Gerais. La rivalidad con Cruzeiro, el otro gran club de Belo Horizonte, aún no había alcanzado su plenitud, pero los primeros choques entre ambos equipos comenzaron a definir el carácter competitivo del fútbol en el estado.
La era del profesionalismo (1930-1959)
Con la llegada del profesionalismo al fútbol brasileño en los años 30, el Atlético Mineiro fue uno de los pioneros en adoptar esta nueva estructura. El profesionalismo trajo consigo la consolidación del club a nivel nacional. Durante estos años, Atlético ganó múltiples títulos regionales y comenzó a atraer a algunos de los mejores jugadores del país.
Uno de los logros más importantes del club durante esta época fue la conquista del Campeonato dos Campeões en 1937, un torneo precursor del Campeonato Brasileño que reunió a los campeones de diversos estados de Brasil. Este título fue visto como un símbolo de la fuerza del fútbol mineiro y del Atlético en particular.
Durante los años 40 y 50, el Atlético Mineiro continuó siendo una fuerza dominante en el Campeonato Mineiro. Jugadores legendarios como Lucas Miranda y Zezé Procópio comenzaron a dejar su huella en el club, ayudando a cimentar su legado. Además, en 1950, el Atlético se convirtió en el primer club brasileño en realizar una gira internacional, viajando a Europa y enfrentándose a grandes equipos del continente, lo que elevó el prestigio del club fuera de las fronteras de Brasil.
Consolidación en el escenario nacional (1960-1980)
Los años 60 marcaron el inicio de una nueva era para Atlético Mineiro. El fútbol brasileño estaba cambiando rápidamente, y los torneos nacionales comenzaban a adquirir mayor relevancia con la creación del Torneo Roberto Gomes Pedrosa en 1967, seguido por el Campeonato Brasileño en 1971.
En 1971, Atlético Mineiro ganó su primer y único título del Campeonato Brasileño bajo la dirección del entrenador Telê Santana, quien más tarde se convertiría en una leyenda del fútbol brasileño. Ese equipo estaba compuesto por jugadores excepcionales como Dadá Maravilha, uno de los mayores goleadores de la historia del fútbol brasileño, y Vantuir, un sólido defensor que fue clave en la estructura del equipo.
El título de 1971 sigue siendo un hito en la historia del club, no solo por ser el primero en el fútbol profesional de Brasil, sino también por la forma en que se logró. Atlético derrotó a grandes equipos de la época como el São Paulo y el Botafogo, y su victoria en el torneo nacional consolidó al club como una de las grandes potencias del fútbol brasileño.
Durante esta época, Atlético también continuó dominando el fútbol regional, ganando numerosos títulos del Campeonato Mineiro y aumentando su rivalidad con Cruzeiro, lo que le añadió más intensidad a los derbis de Belo Horizonte.
La década de 1980: Un equipo formidable
Los años 80 fueron una época dorada para el Atlético Mineiro en términos de talento y rendimiento en el campo. Aunque no pudo replicar el éxito del título brasileño de 1971, el equipo de esta década es ampliamente considerado como uno de los mejores que ha tenido el club.
En 1980, Atlético llegó a la final del Campeonato Brasileño, pero fue derrotado por el Flamengo, en un partido recordado por la actuación del árbitro José Roberto Wright, quien expulsó a cinco jugadores del Atlético, lo que generó una gran controversia.
El club continuó siendo uno de los contendientes más fuertes en los torneos nacionales, y algunos de los jugadores más talentosos de Brasil pasaron por el equipo durante esta época, como Éder, Reinaldo y Toninho Cerezo. Reinaldo, en particular, es una figura legendaria en la historia del Atlético Mineiro. A pesar de las lesiones que acortaron su carrera, fue un delantero formidable, y su capacidad goleadora y liderazgo dentro del campo lo convirtieron en un ídolo indiscutible para los aficionados del Galo.
Luchas y resurgimiento (1990-2009)
La década de 1990 fue difícil para Atlético Mineiro. A pesar de contar con equipos competitivos y jugadores talentosos, el club no logró ganar títulos importantes a nivel nacional. Sin embargo, siguió siendo una de las principales fuerzas en el Campeonato Mineiro y se mantuvo como un equipo de primera categoría en Brasil.
Uno de los momentos más destacados de esta época fue la llegada de Taffarel, el legendario portero brasileño que ganó la Copa del Mundo de 1994 con la selección nacional. Taffarel fue una figura clave para el club durante su estadía en Belo Horizonte.
En los años 2000, la situación no mejoró mucho para el Atlético. Aunque el equipo mantuvo su lugar en la Serie A del Campeonato Brasileño, tuvo que enfrentarse a serios problemas financieros y deportivos, lo que lo llevó a una breve caída a la Serie B en 2005. Sin embargo, el equipo logró ascender nuevamente a la máxima categoría en 2006, mostrando la resiliencia característica del club.
El retorno a la gloria: Era Cuca y Libertadores (2010-2020)
La década de 2010 marcó el renacimiento del Atlético Mineiro. Después de años de luchas y desafíos, el club finalmente regresó al centro de la atención del fútbol brasileño e internacional. En 2012, con la llegada de Ronaldinho Gaúcho, el club experimentó un cambio radical. El astro brasileño, aunque en la última etapa de su carrera, fue crucial para el resurgimiento del equipo.
En 2013, bajo la dirección del entrenador Cuca, Atlético Mineiro ganó su primer y único título de la Copa Libertadores, el torneo de clubes más prestigioso de América del Sur. La campaña de la Libertadores de 2013 fue épica. El equipo se sobrepuso a una serie de desafíos, incluidas victorias en tanda de penales dramáticas contra Tijuana en los cuartos de final y Olimpia en la final.
Los héroes de esa campaña incluyeron a Victor, el arquero cuyo desempeño en la tanda de penales lo convirtió en un héroe eterno para los fanáticos del Galo, y Ronaldinho, quien con su talento y carisma ayudó a elevar al Atlético al nivel más alto del fútbol sudamericano.
En los años siguientes, Atlético Mineiro continuó siendo un contendiente fuerte tanto a nivel nacional como internacional. Ganó títulos como la Copa do Brasil en 2014 y la Recopa Sudamericana en 2014. Además, jugadores como Diego Tardelli, Jô, y Leonardo Silva contribuyeron significativamente al éxito del equipo durante este periodo.
La actualidad y el futuro del Atlético Mineiro
En los últimos años, Atlético Mineiro ha continuado siendo uno de los principales clubes de Brasil, luchando por títulos nacionales y participando regularmente en competiciones internacionales. En 2021, bajo la dirección de Cuca una vez más, el equipo ganó su segundo Campeonato Brasileño, rompiendo una sequía de 50 años desde su primer título en 1971. El equipo también ganó la Copa do Brasil en ese mismo año, logrando un doblete histórico.
El club sigue atrayendo a grandes jugadores y ha consolidado su posición como uno de los clubes más valiosos y populares de Brasil. La Arena MRV, el nuevo estadio del club, es otro indicativo de su continuo crecimiento y ambición. Con una infraestructura moderna y una afición incondicional, Atlético Mineiro parece estar bien posicionado para seguir compitiendo al más alto nivel en el fútbol brasileño e internacional.
Conclusión
La historia del Atlético Mineiro es una historia de pasión, lucha y éxito. Desde sus humildes inicios en Belo Horizonte, el club ha crecido hasta convertirse en uno de los gigantes del fútbol brasileño. A lo largo de más de un siglo, Atlético ha experimentado altibajos, pero siempre ha mantenido su compromiso con el éxito y con su fervorosa hinchada. Con un legado consolidado y un futuro brillante, el Galo continúa volando alto en el fútbol mundial.