Ford Focus Sedan 2014-2018: Un análisis detallado de una de las versiones más exitosas de la marca estadounidense
El Ford Focus ha sido uno de los modelos más populares y vendidos del fabricante estadounidense Ford. En particular, la tercera generación del Ford Focus, que se lanzó en 2012, marcó un hito importante en la historia de este compacto de la marca, con un diseño más moderno, tecnología avanzada y una gama de motorizaciones para adaptarse a las necesidades de los diferentes mercados. La versión sedan del Ford Focus, presentada en 2014 como parte de un facelift de la gama, fue una de las opciones más atractivas para los conductores que buscaban un vehículo versátil, de buen rendimiento y con un diseño sofisticado.
Diseño exterior y facelift (2014-2018)
La tercera generación del Ford Focus se mantuvo en producción hasta 2018, con un rediseño significativo en 2014. El enfoque de Ford fue ofrecer a sus clientes un modelo más estilizado, con una apariencia más refinada, sin perder la esencia de su diseño compacto. El Focus Sedan fue particularmente importante en mercados europeos, donde los vehículos de tres volúmenes, como los sedanes, son considerados más sofisticados en comparación con los hatchbacks, a pesar de tener un precio similar.
Uno de los cambios más notables en el facelift de 2014 fueron los nuevos faros delanteros, que eran más estrechos y con una mayor presencia. También se rediseñó la parrilla frontal, lo que mejoró la apariencia general del vehículo y le dio un toque más moderno. En la parte trasera, las luces se actualizaron para adoptar un diseño más acorde con la estética contemporánea de los vehículos Ford.
Las dimensiones del Focus Sedan eran ideales para el segmento compacto. Con una longitud de 4534 mm, una anchura de 1857 mm y una altura de 1483 mm, este vehículo era lo suficientemente grande como para ofrecer una cabina cómoda sin perder la agilidad y facilidad de maniobra que caracteriza a los compactos. Además, contaba con un maletero de 374 litros, lo que lo convertía en un vehículo práctico tanto para el uso urbano como para viajes largos.
Interior y tecnología: Un enfoque en la conectividad
El interior del Ford Focus Sedan fue uno de sus aspectos más apreciados por los conductores, principalmente por la calidad de los materiales, el diseño funcional y las tecnologías incorporadas. El modelo de 2014 presentó una nueva opción de pantalla táctil de 8 pulgadas en la consola central, lo que mejoró la interacción del conductor con el sistema de infotainment. La pantalla más grande incorporaba botones adicionales para controlar diversas funciones, lo que hacía más intuitivo el manejo del sistema. Para quienes no elegían la pantalla de 8 pulgadas, el modelo estándar venía con una pantalla de 4,2 pulgadas, que ofrecía una buena visualización de la información del vehículo.
Además, una de las características estándar del Ford Focus Sedan 2014-2018 fue la cámara de reversa, que proporcionaba mayor seguridad y comodidad al estacionar o maniobrar en espacios reducidos. Esta función de serie, junto con el volante con ajustes eléctricos y el recalibrado de la dirección asistida eléctrica, mejoró considerablemente la experiencia de conducción.
El espacio interior era adecuado para un coche de este segmento. En la parte trasera, el Focus Sedan ofrecía espacio suficiente para tres adultos, aunque los pasajeros más cómodos serían solo dos, especialmente si se trataba de personas de tamaño promedio. Esto lo convertía en un vehículo ideal para familias pequeñas o para aquellos que necesitaban un automóvil eficiente para el día a día.
Motorización y rendimiento: Un motor para cada necesidad
El Ford Focus Sedan estuvo disponible con una amplia gama de motorizaciones tanto diésel como gasolina, lo que permitía a los compradores elegir la opción que mejor se ajustara a sus necesidades y preferencias de conducción. La versión más asequible y popular fue el motor de 1.0 litros EcoBoost, un propulsor turboalimentado de tres cilindros que ofrecía una potencia de 100 caballos de fuerza (74 kW) a 6000 RPM y un par motor de 169 Nm (125 lb-ft) entre 1400 y 4000 RPM.
A pesar de ser un motor pequeño, el 1.0L EcoBoost ofrecía una sorprendente combinación de eficiencia de combustible y rendimiento. Con una velocidad máxima de 185 km/h (115 mph) y una aceleración de 0 a 100 km/h en 12.6 segundos, el Focus Sedan 1.0L EcoBoost ofrecía un rendimiento adecuado para aquellos que necesitaban un coche práctico y ágil en la ciudad, pero con la capacidad de realizar viajes largos sin comprometer la eficiencia de combustible.
El Ford Focus Sedan también se ofreció con versiones más potentes, como el motor de 2.0 litros EcoBoost, que proporcionaba una experiencia de conducción más dinámica. Para los conductores más exigentes, la versión RS del Focus, disponible solo en la variante hatchback, estaba equipada con un motor de 2.3 litros, aunque esta opción era menos accesible para quienes preferían el formato sedan.
En términos de eficiencia de combustible, el Focus Sedan 1.0L EcoBoost fue bastante competitivo. El modelo alcanzaba 30.2 mpg en ciudad y 58.4 mpg en carretera (aproximadamente 7.8 L/100 km en ciudad y 9.8 L/100 km en carretera), lo que lo convertía en una opción atractiva para quienes buscaban un vehículo económico en términos de consumo de combustible.
Conducción y comportamiento en carretera
El Ford Focus ha sido siempre reconocido por su comportamiento en carretera, y la versión sedan no fue una excepción. Gracias al ajuste de la dirección asistida eléctrica, la conducción era precisa y agradable. Además, el enfoque de Ford para optimizar la aerodinámica del vehículo permitió que el Focus Sedan mantuviera una eficiencia de combustible superior y una mayor estabilidad a altas velocidades.
Aunque el Focus Sedan estaba orientado principalmente al confort y la eficiencia, no dejaba de ser un vehículo que ofrecía un manejo satisfactorio en carreteras tanto urbanas como rurales. Los frenos de disco ventilados en el eje delantero y los frenos de tambor en el eje trasero proporcionaban un rendimiento de frenado adecuado para el tipo de vehículo, mientras que la suspensión ofrecía una experiencia equilibrada, sin ser excesivamente dura ni demasiado blanda.
Seguridad y equipamiento
La seguridad era una de las prioridades de Ford en el desarrollo del Focus Sedan. El modelo venía de serie con una amplia gama de características de seguridad, incluyendo el sistema de control de estabilidad, el sistema de frenos antibloqueo (ABS) y el control de tracción. Además, la cámara de reversa, mencionada anteriormente, mejoraba la seguridad al maniobrar en espacios reducidos.
En cuanto a la protección activa y pasiva, el Focus Sedan estaba equipado con múltiples airbags, tanto frontales como laterales, y con estructuras de carrocería diseñadas para absorber los impactos de manera eficiente. Estos detalles hicieron que el Ford Focus fuera uno de los vehículos más seguros en su clase durante su período de producción.
Conclusión
El Ford Focus Sedan 2014-2018 fue un vehículo que logró combinar de manera efectiva rendimiento, eficiencia, confort y tecnología. Ofreció una variedad de motorizaciones para adaptarse a diferentes tipos de conductores, un diseño moderno y refinado, y una experiencia de conducción que satisfizo tanto a los conductores urbanos como a los que necesitaban un coche para viajes largos.
La opción sedan, en particular, fue un éxito en el mercado europeo, donde se valoraba la estética de los tres volúmenes y las características de confort que ofrecía el modelo. En resumen, el Ford Focus Sedan de esta generación es un vehículo bien equilibrado que sigue siendo una opción atractiva en el mercado de autos usados, especialmente para aquellos que buscan un automóvil confiable, eficiente y con buena relación calidad-precio.
