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Ford Focus RS 2008-2011

FORD Focus RS 2008-2011: La Revolución en el Segmento Compacto

El Ford Focus RS 2008-2011 marcó un antes y un después en la historia de los coches compactos de alto rendimiento, demostrando que los coches de tracción delantera (FWD) con más de 200 caballos de fuerza no tenían que ser una pesadilla de subviraje. Este modelo fue un hito en la industria automotriz, pues desafió las teorías convencionales sobre el manejo de vehículos con altas potencias en el eje delantero. Su lanzamiento representó la capacidad de Ford de transformar el Focus en una máquina de altas prestaciones, sin perder la esencia de su versión compacta.

Diseño Exterior: Un Enfoque Radial

El Ford Focus RS 2008-2011 no dejaba lugar a dudas desde su primer vistazo. La carrocería de tres puertas adoptó una serie de modificaciones sustanciales que la diferenciaban notablemente de las versiones más convencionales del Focus. El frontal fue completamente rediseñado, con un parachoques más grande que albergaba una gran toma de aire y un alerón frontal de mayores dimensiones. Esta toma no solo tenía un propósito estético, sino también funcional, pues ayudaba al sistema de refrigeración del motor.

En el capó, Ford añadió dos grandes ventilaciones que no solo contribuían al enfriamiento del motor, sino que también le daban al coche una apariencia agresiva y dinámica. En la parte trasera, un imponente alerón con winglets reemplazó el spoiler convencional, subrayando la intención deportiva del coche.

Además, los flancos del coche estaban adornados con tomas de aire en los guardabarros delanteros y los faldones laterales, elementos que anunciaban a gritos que este no era un Focus común. La estética de la carrocería, aunque enfocada en la funcionalidad, no escatimaba en audacia. Cada elemento estaba cuidadosamente diseñado para maximizar la aerodinámica y la eficiencia en la pista.

Interior: Tecnología y Rendimiento

En el interior, Ford buscó mantener una coherencia con el diseño exterior, ofreciendo una experiencia que combinaba confort y deportividad. Los asientos Recaro eran uno de los principales atractivos, ya que estaban diseñados específicamente para ofrecer un soporte excepcional durante la conducción en altas velocidades. Estos asientos, confeccionados en microfibra auténtica de motorsport, presentaban un diseño que coincidia con los colores exteriores del vehículo, añadiendo un toque de exclusividad. Como opción, Ford también ofrecía asientos parciales de cuero negro Ebony, para aquellos que deseaban un toque más de lujo.

El panel de instrumentos fue igualmente revisado, con nuevos relojes analógicos que proporcionaban información específica sobre la presión del turbo, la temperatura del aceite y la presión del aceite, vital para los conductores que deseaban exprimir al máximo el rendimiento del motor.

Motor y Rendimiento: Potencia Controlada

El corazón del Focus RS 2008-2011 era un motor de 5 cilindros en línea de 2.5 litros, capaz de generar 305 caballos de fuerza (224 kW a 6500 rpm) y un impresionante 441 Nm de par motor (325 lb-ft) entre las 2300 y 4500 rpm. Este motor turboalimentado, combinado con un sistema de inyección multipunto, estaba perfectamente calibrado para ofrecer un equilibrio entre potencia bruta y control.

A diferencia de otras versiones deportivas de tracción delantera que sufrían de subviraje o torque-steer (desviación de la dirección debido al exceso de par motor en las ruedas delanteras), el Focus RS empleaba dos tecnologías innovadoras para mitigar este problema. Primero, el sistema RevoKnuckle en el tren delantero, que limitaba la transferencia de par motor a las ruedas, y en segundo lugar, el diferencial de deslizamiento limitado Quaife, que ayudaba a distribuir de manera más uniforme la potencia a las ruedas, evitando el comportamiento errático en curvas.

Gracias a estas innovaciones, el Focus RS era capaz de transmitir su potencia al suelo sin comprometer la estabilidad, ofreciendo un manejo preciso y controlado. Con una velocidad máxima de 263 km/h (163.4 mph) y una aceleración de 0 a 100 km/h en 5.9 segundos, este coche no solo impresionaba en la teoría, sino también en la práctica. De hecho, su tiempo en el Nürburgring Nordschleife de 8 minutos y 26 segundos fue un testimonio de su agilidad y capacidad para enfrentar circuitos complejos y desafiantes.

Especificaciones Técnicas

El Ford Focus RS 2008-2011 contaba con una serie de especificaciones técnicas que lo hacían destacar en su categoría. Aquí te las detallamos:

Especificación Valor
Motor 2.5 L 5 Cilindros
Potencia 305 HP (224 kW) @ 6500 RPM
Par Motor 441 Nm (325 lb-ft) @ 2300-4500 RPM
Sistema de Combustible Inyección multipunto turboalimentada
Tipo de Combustible Gasolina
Velocidad Máxima 263 km/h (163.4 mph)
Aceleración 0-100 km/h 5.9 segundos
Tipo de Transmisión Manual de 6 marchas
Suspensión Delantera RevoKnuckle
Diferencial Quaife de deslizamiento limitado
Llantas 235/35 R19
Peso en vacío 1468 kg (3236.4 lbs)
Consumo Ciudad 13.4 L/100 km (17.6 mpg US)
Consumo Autopista 9.4 L/100 km (25 mpg US)
Emisiones de CO2 225 g/km
Capacidad del Maletero 385 L

Comportamiento en la Pista: El Rey del Nürburgring

El Focus RS no solo fue un coche impresionante en las rectas, sino que demostró su verdadero valor en circuitos complejos. El tiempo registrado en el Nürburgring Nordschleife, considerado uno de los circuitos más exigentes del mundo, fue de 8 minutos y 26 segundos. Este tiempo lo posicionó como uno de los vehículos de producción más rápidos en ese momento, superando incluso a coches de categorías superiores.

Esta hazaña no fue solo mérito de la potencia del motor, sino también de las tecnologías empleadas para garantizar que el coche tuviera el control necesario en curvas y frenadas fuertes. La suspensión adaptada, el control del par motor y el diferencial limitado de deslizamiento contribuyeron a que el Focus RS pudiera desafiar las leyes de la física y entregar un rendimiento sin igual.

Conclusión: El Ícono de la Tracción Delantera

El Ford Focus RS 2008-2011 no solo redefinió las expectativas de lo que un coche de tracción delantera podía lograr, sino que también estableció un nuevo estándar en el segmento de los compactos deportivos. Su diseño agresivo, combinado con su motor de alto rendimiento y sus innovadoras tecnologías de control, lo convirtieron en un coche que se destacaba tanto en la carretera como en la pista.

Para los amantes de los coches deportivos, el Focus RS fue una joya que combinaba la deportividad y la accesibilidad de un coche compacto con la capacidad de ofrecer un rendimiento de nivel superior. A día de hoy, sigue siendo una referencia en su categoría, y su legado perdura como un símbolo de la ingeniería deportiva de Ford.

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