FORD Cortina 1966-1970: La Evolución de un Clásico de la Automoción
En el mundo de los automóviles, ciertos modelos logran captar la atención de los conductores y marcar una era en la historia del diseño y la ingeniería. Uno de estos modelos es el Ford Cortina, un vehículo que, durante su segunda generación (1966-1970), se convirtió en un símbolo de la automoción británica e internacional. La historia del Ford Cortina MK II es fascinante, y su impacto en la industria automotriz sigue siendo recordado hasta el día de hoy.
La Introducción del Cortina MK II
Ford introdujo la segunda generación del Cortina en 1966, con un modelo completamente renovado que transformó por completo la percepción del público sobre lo que un automóvil compacto podía ofrecer. Este nuevo modelo, con un diseño más moderno y una mayor calidad en los acabados, rápidamente desbancó a competidores tradicionales y ascendió rápidamente a la cima de las listas de ventas. La marca Ford se mostró orgullosa de haber dejado atrás a marcas como Austin, que había sido un competidor formidable en el mercado británico. Con el Cortina MK II, Ford no solo estaba haciendo frente a la competencia británica, sino que también estaba ganando terreno frente a otros fabricantes internacionales.
Diseño y Características
El Ford Cortina MK II presentó varias mejoras significativas en términos de diseño y confort. En comparación con su predecesor, el Cortina MK I, el modelo MK II era más espacioso, tanto en el interior como en el maletero. Roy Haynes, el diseñador principal de este modelo, posiblemente se inspiró en los vehículos de Ford en Estados Unidos, como el Ford Falcon, para desarrollar un diseño que fuera más ancho y más grande, lo que resultó en un interior mucho más cómodo y espacioso para los ocupantes.
A lo largo de los años, Ford añadió diferentes versiones de carrocería a la gama, lo que permitió que el Cortina MK II se adaptara a las diversas necesidades de los consumidores. Inicialmente, se ofreció solo en versión sedán de dos puertas, pero más tarde se añadieron la versión de cuatro puertas y la versión familiar (station wagon), lo que consolidó aún más su popularidad. La gama de opciones de carrocería permitió que el Cortina fuera una opción atractiva para familias, conductores urbanos y personas que buscaban un vehículo más versátil y de mayor capacidad de carga.
Interior de Alta Calidad
Una de las características más destacadas del Ford Cortina MK II fue su interior, que reflejaba la evolución de los estándares de calidad de Ford en la época. Los materiales utilizados en el interior del vehículo eran de mayor calidad, con acabados que incluían asientos de cubo mejorados y detalles como molduras de nogal en el tablero de instrumentos. Algunos modelos específicos, como el Cortina 1600 E-Executive, que se lanzó en el Salón del Automóvil de París, ofrecían una versión más lujosa con asientos individuales en la parte trasera y un reposabrazos central plegable, lo que le daba al vehículo un aire más ejecutivo y cómodo.
Motorización y Rendimiento
Bajo el capó, el Ford Cortina MK II ofreció una variedad de opciones de motorización, lo que permitía que los conductores eligieran el modelo que mejor se adaptara a sus necesidades. El motor más pequeño era un motor de 1.1 litros, diseñado especialmente para el mercado griego, que proporcionaba una opción económica y eficiente. Para aquellos que buscaban un mayor rendimiento, había opciones más potentes, incluyendo un motor V6 de 3.0 litros, instalado en versiones destinadas al mercado sudamericano.
Una de las versiones más populares del Cortina MK II fue la versión deportiva, que contó con la colaboración de Lotus en su desarrollo. Esta variante, conocida como el Cortina Twin-Cam, estaba equipada con un motor de mayor rendimiento, lo que le otorgaba características deportivas y mejoraba significativamente su capacidad de conducción. La colaboración con Lotus fue clave para ofrecer un vehículo que no solo tuviera una excelente relación calidad-precio, sino que también pudiera competir con otros modelos más deportivos y de mayor cilindrada en el mercado europeo.
Especificaciones Técnicas
El Ford Cortina MK II estaba disponible con varias opciones de motorización y configuración, pero una de las versiones más comunes fue la equipada con un motor de 1.3 litros. Esta motorización generaba 64 caballos de fuerza a 5300 revoluciones por minuto, con un par motor de 72 lb-ft a 2500 rpm. El motor estaba acoplado a una caja de cambios manual de 4 velocidades, lo que permitía al conductor disfrutar de una experiencia de conducción más interactiva y controlada.
En términos de rendimiento, el Cortina MK II alcanzaba una velocidad máxima de 132 km/h (82 mph), lo que lo hacía adecuado tanto para la conducción urbana como para viajes en carretera. El sistema de frenos era bastante avanzado para la época, con discos en las ruedas delanteras y tambores en las ruedas traseras, lo que proporcionaba una buena capacidad de frenado.
Dimensiones y Características Adicionales
En cuanto a las dimensiones, el Cortina MK II tenía una longitud de 4267 mm, con un ancho de 1646 mm y una altura de 1392 mm. La distancia entre ejes era de 2489 mm, lo que otorgaba una mayor estabilidad y comodidad en la conducción. El despeje del suelo del vehículo era de 165 mm, lo que le permitía circular por diversas condiciones de carretera sin problemas.
El peso en vacío del Cortina era de 864 kg, lo que lo convertía en un vehículo relativamente liviano para su época, lo que, combinado con su motor y su diseño aerodinámico (con un coeficiente de resistencia aerodinámica (Cd) de 0.5), le confería una buena eficiencia de combustible y maniobrabilidad.
El Legado del Cortina MK II
El Ford Cortina MK II es recordado como uno de los vehículos más importantes en la historia de la marca Ford. A lo largo de los años, este modelo no solo ganó popularidad en Reino Unido, sino también en muchos otros mercados internacionales. Su diseño práctico, combinado con un rendimiento sobresaliente y una excelente relación calidad-precio, lo convirtió en un verdadero éxito en las ventas. Durante su producción entre 1966 y 1970, el Cortina MK II se convirtió en un vehículo imprescindible en las carreteras de Europa y América del Sur.
Aunque el modelo fue reemplazado por nuevas generaciones en la década de 1970, el Cortina MK II sigue siendo un símbolo de la era dorada de los automóviles compactos. Con el tiempo, muchos de estos vehículos se han convertido en clásicos de colección, y los entusiastas del automovilismo continúan apreciando su diseño robusto y su legado en la historia de la automoción.
El Ford Cortina 1966-1970 es un claro ejemplo de cómo un vehículo puede trascender su época, dejando una huella indeleble en la industria automotriz. Su éxito no solo se debió a su rendimiento y diseño, sino también a su capacidad para adaptarse a las necesidades cambiantes del mercado, ofreciendo un automóvil accesible, práctico y elegante para una amplia variedad de conductores.
Conclusión
El Ford Cortina MK II sigue siendo uno de los modelos más queridos y admirados de la marca Ford. Con su combinación de diseño atractivo, rendimiento confiable y precio accesible, el Cortina MK II logró ganarse un lugar destacado en la historia de la automoción, y su legado perdura hasta el día de hoy. Este modelo es una prueba de cómo la innovación y la calidad pueden converger para crear un automóvil que no solo satisface las necesidades de los conductores, sino que también marca un antes y un después en la industria.
