Coches

Ferrari 328 GTB: Icono Clásico

Ferrari 328 GTB 1985-1989: Un ícono de estilo y rendimiento

El Ferrari 328 GTB, junto con su versión descapotable, el 328 GTS, representa uno de los modelos más emblemáticos de la marca italiana en la década de los 80. Este coupé de dos puertas, producido entre 1985 y 1989, es considerado por muchos como un sucesor digno de su antecesor, el Ferrari 308, al ofrecer un mejor manejo, más potencia y un diseño actualizado que hizo de este coche un verdadero icono de su época.

Un Diseño Refinado y Moderno

Visualmente, el Ferrari 328 GTB hizo una notable evolución respecto a la línea 308. Aunque ambos modelos compartían la esencia de la marca, el 328 presentaba un perfil lateral más refinado y estilizado, con una parte delantera completamente rediseñada que incluía una parrilla inferior más grande, flanqueada por las luces de conducción. Esta modificación no solo aportaba un aspecto más agresivo y contemporáneo, sino que también mejoraba la eficiencia aerodinámica del vehículo.

Los ventrículos situados detrás de los faros retráctiles fueron eliminados, lo que contribuyó a un diseño más limpio y elegante. En la parte trasera, los cambios fueron igualmente significativos, con una revisión de las formas y líneas que otorgaron al coche un aspecto más moderno. Los parachoques también recibieron un tratamiento que los integraba al color de la carrocería, lo que daba como resultado una estética más coherente y menos recargada. Además, las llantas de 5 radios planos, que en el modelo anterior tenían una forma más plana, fueron ligeramente curvadas para ofrecer una estética más deportiva.

Motor y Rendimiento

En cuanto a su motorización, el Ferrari 328 GTB adoptó un motor V8 de 3.2 litros, con una potencia de 260 caballos de fuerza a 7000 rpm, lo que representaba una mejora significativa respecto al 308. Este motor estaba acoplado a una transmisión manual de 5 velocidades, ubicada justo debajo del motor junto al cárter de aceite, lo que mejoraba la distribución del peso y, por ende, la maniobrabilidad del coche. Con un par motor de 289 Nm a 5500 rpm, el Ferrari 328 GTB ofrecía una respuesta inmediata al acelerador, permitiendo que alcanzara una velocidad máxima de 257 km/h (160 mph).

La aceleración de 0 a 100 km/h (0-62 mph) en tan solo 6.5 segundos era una marca impresionante para la época, y representaba una verdadera muestra del rendimiento superior de este coche. El 328 GTB era capaz de mantener un equilibrio entre la potencia y la conducción deportiva sin sacrificar la estabilidad, gracias a la inclusión de discos de freno en las cuatro ruedas y una suspensión independiente que aseguraba una conducción precisa y segura, incluso a altas velocidades.

Suspensión y Tecnología

El chasis del 328 GTB mantenía la esencia del 308, con la diferencia de que los ingenieros de Ferrari introdujeron mejoras sustanciales en el sistema de suspensión. El modelo venía equipado con barras estabilizadoras en la parte delantera y trasera, junto con una suspensión que, al ser modificada para albergar el sistema ABS como opción, ofrecía un manejo más seguro y preciso, lo que era un verdadero avance tecnológico para la época.

Aunque no todos los modelos venían de serie con ABS, el sistema estaba disponible como opción, lo que aumentaba aún más la seguridad del vehículo. Las llantas del Ferrari 328 GTB eran de 16 pulgadas, con medidas de 205/55 VR en el eje delantero y 225/50 VR en el trasero, lo que proporcionaba un equilibrio perfecto entre estabilidad y maniobrabilidad.

El Interior: Confort y Estilo

El interior del Ferrari 328 GTB fue también objeto de una revisión estética y funcional. El diseño del panel de asientos, la tapicería y las costuras fueron actualizados, mientras que los paneles de las puertas y los tiradores también recibieron una renovación. Los materiales de alta calidad y el diseño minimalista de Ferrari creaban una atmósfera deportiva, pero al mismo tiempo, confortable.

El volante de tres radios y el cuadro de instrumentos eran simples, pero funcionales, ofreciendo al conductor toda la información necesaria de manera clara y precisa. Además, el Ferrari 328 GTB introdujo un nuevo conjunto de interruptores y botones para un control más eficiente de las funciones del vehículo. Entre las opciones disponibles para el interior, se encontraba el aire acondicionado, un tablero de cuero y un tapizado en el techo, lo que mejoraba aún más la experiencia de conducción.

Especificaciones Técnicas del Ferrari 328 GTB

A continuación, se presentan las especificaciones técnicas más relevantes del Ferrari 328 GTB, que demuestran su rendimiento y capacidades:

Especificación Detalle
Motor V8 de 3.2 litros
Potencia 260 hp a 7000 rpm
Par Motor 289 Nm a 5500 rpm
Transmisión Manual de 5 velocidades
Velocidad Máxima 257 km/h (160 mph)
Aceleración 0-100 km/h 6.5 segundos
Suspensión Independiente con barras estabilizadoras
Frenos Discos en ambas ruedas
Neumáticos 205/55 VR 16 (delante), 225/50 VR 16 (atrás)
Consumo Combustible (ciudad) 18.1 L/100 km
Consumo Combustible (carretera) 15.7 L/100 km
Peso en Vacío 1348 kg (2972 lbs)
Capacidad del Maletero 246 L (8.7 cu pies)
Emisiones de CO2 No especificado

La Experiencia de Conducción

El Ferrari 328 GTB no solo era un coche rápido, sino que también ofrecía una experiencia de conducción superior, tanto en carretera abierta como en circuitos cerrados. La combinación de su motor V8 y la transmisión manual proporcionaba una conexión directa entre el conductor y el vehículo, permitiendo cambios de marcha rápidos y suaves, con un rugido del motor que proporcionaba una sensación inigualable.

El sistema de suspensión, junto con los frenos de disco, aseguraba que el Ferrari 328 GTB tuviera una maniobrabilidad excepcional, con un agarre firme en las curvas y una estabilidad impresionante a altas velocidades. Esta combinación de potencia, tecnología y diseño hacía que cada viaje a bordo de este modelo fuera una experiencia única.

Conclusión

El Ferrari 328 GTB, fabricado entre 1985 y 1989, sigue siendo uno de los modelos más admirados y codiciados de la marca italiana. Su equilibrio entre estilo, potencia, tecnología y comodidad lo convierte en un automóvil que no solo se destacó en su época, sino que sigue siendo un símbolo del rendimiento y la elegancia.

Este coupé de dos puertas no solo ofrecía un rendimiento impresionante, sino que también destacaba por su diseño sofisticado, que no ha perdido su atractivo con el paso de los años. El Ferrari 328 GTB es, sin lugar a dudas, una obra maestra de la ingeniería automotriz que sigue siendo un referente para los amantes de los autos deportivos clásicos.

Botón volver arriba