5 cosas que debes evitar en la última hora de tu jornada laboral
La última hora de trabajo es un momento crucial que puede determinar cómo cierras tu día y cómo inicias el siguiente. Muchas personas tienden a subestimar la importancia de este período, pero lo cierto es que tus acciones en esta franja horaria pueden influir en tu productividad, bienestar y equilibrio entre la vida laboral y personal. A continuación, exploraremos cinco cosas que debes evitar durante la última hora de tu jornada laboral para maximizar tu rendimiento y reducir el estrés.
1. Evitar tareas complicadas de última hora
Al final de la jornada laboral, tu nivel de energía y concentración suelen estar en su punto más bajo. Intentar abordar tareas complejas en este momento no solo puede llevar a errores, sino también a frustración. Además, si no logras completarlas, es probable que las lleves contigo mentalmente a casa, dificultando tu capacidad para desconectar.
¿Qué hacer en su lugar?
Opta por tareas simples y mecánicas, como organizar tu escritorio, revisar tu lista de pendientes para el día siguiente o responder correos electrónicos menos urgentes. Esto te permitirá cerrar el día de manera tranquila y preparar el terreno para un inicio más eficiente al día siguiente.
2. No prolongues reuniones innecesarias
Las reuniones que se extienden más allá de lo programado son un enemigo común de la productividad. Si permites que una reunión consuma tu última hora de trabajo, puedes terminar sacrificando tiempo esencial para concluir tus tareas pendientes o planificar el día siguiente.
¿Qué hacer en su lugar?
Establece límites claros para las reuniones, asegurándote de que comiencen y terminen a tiempo. Si estás en una posición para decidir, evita programar reuniones en la última hora del día. Utiliza este tiempo para reflexionar y ordenar tus prioridades en lugar de entrar en discusiones prolongadas.
3. Evitar el consumo excesivo de tecnología
Es común sentir la tentación de revisar redes sociales, páginas web o incluso noticias en la última hora de trabajo. Sin embargo, este hábito puede distraerte de tareas importantes y hacer que pierdas el enfoque necesario para cerrar tu jornada de manera efectiva.
¿Qué hacer en su lugar?
Limita el uso de dispositivos electrónicos que no estén relacionados con el trabajo. Si necesitas un descanso, opta por una breve caminata o un ejercicio de respiración para despejar tu mente. Esto te ayudará a mantenerte enfocado y a cerrar el día con una sensación de logro.
4. Evitar decisiones importantes
Tomar decisiones importantes cuando estás mentalmente agotado puede resultar en errores o elecciones poco reflexivas. Durante la última hora de trabajo, tu capacidad para analizar y evaluar situaciones con claridad tiende a disminuir debido a la fatiga acumulada.
¿Qué hacer en su lugar?
Si es posible, pospón las decisiones significativas para la mañana siguiente, cuando tu mente esté más fresca. Si la decisión no puede esperar, asegúrate de revisar todos los detalles con detenimiento y, si es necesario, consulta con un colega antes de proceder.
5. No ignores el proceso de desconexión
Uno de los errores más comunes al finalizar la jornada laboral es no tomarse el tiempo para desconectarse adecuadamente. Saltarte este paso puede llevarte a sentirte abrumado, incluso después de haber terminado oficialmente tu trabajo.
¿Qué hacer en su lugar?
Dedica los últimos minutos de tu día laboral a una rutina de cierre. Esto puede incluir revisar y actualizar tu lista de tareas, apagar tu computadora, limpiar tu espacio de trabajo y establecer una intención positiva para el día siguiente. Este ritual no solo marcará un límite claro entre tu vida laboral y personal, sino que también contribuirá a tu bienestar emocional.
Conclusión
La última hora de tu jornada laboral no es un tiempo para ser desperdiciado o subestimado. Al evitar tareas complicadas, reuniones extensas, distracciones tecnológicas, decisiones importantes y una desconexión inadecuada, puedes terminar tu día con una sensación de control y logro. Implementar estos cambios no solo mejorará tu productividad, sino que también te permitirá disfrutar de una mejor calidad de vida fuera del trabajo.
Recuerda: un buen cierre de jornada es el primer paso hacia un gran comienzo al día siguiente.