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Dacia 1325 Liberta: Historia y Diseño

Dacia 1325 Liberta 1990-1996: Un vistazo a la historia de un hatchback icónico

El Dacia 1325 Liberta es un automóvil que marcó un hito en la historia de la automotriz rumana. Esta versión de la marca Dacia no solo se destacó por ser el primer hatchback genuino de la compañía, sino que también representó un cambio significativo en la estrategia de diseño y producción de la marca en los años post-revolución. A través de los años 1990 a 1996, el Dacia 1325 Liberta se fue perfilando como un coche de masas, accesible, funcional y con un toque de modernidad que lo diferenciaba de otros modelos de la época.

Origen y contexto histórico

El nombre «Liberta» fue dado al Dacia 1325 después de la Revolución Rumana de 1989, simbolizando la libertad y los nuevos horizontes para el país, que se encontraba en una etapa de transición hacia una economía de mercado. Dacia, que hasta entonces había fabricado vehículos basados en plataformas de Renault, como el Dacia 1100 o el 1300, comenzó a necesitar una transformación. En este periodo de cambios, los ingenieros y diseñadores de Dacia crearon dos nuevas carrocerías bajo el proyecto CN1 y CN2, las cuales constituirían la base del futuro Dacia 1325 Liberta.

La versión CN2, que se introdujo como el modelo Liberta, presentó un diseño más dinámico y atractivo, con un maletero de mayor altura y una cola más corta en comparación con la versión CN1. Esta renovación estética le permitió al 1325 Liberta destacarse frente a los modelos anteriores, como el Dacia 1410, que todavía conservaba un diseño más anticuado y menos aerodinámico.

Diseño exterior

El diseño exterior del Dacia 1325 Liberta se caracterizó por una apariencia moderna y distintiva, especialmente para los estándares de la época en Rumanía. En la parte frontal, el coche tenía faros cuadrados y una parrilla de plástico con láminas horizontales, lo que le otorgaba una estética algo más robusta en comparación con otros vehículos de su segmento. El parachoques de plástico negro envolvía la parte delantera, y no había opción para uno pintado del mismo color que la carrocería, lo que le daba un aire de simplicidad y durabilidad.

Los espejos y manijas de las puertas también estaban fabricados en plástico negro, lo que daba un toque homogéneo al vehículo. En la parte trasera, el Liberta presentaba una puerta de maletero inclinada con un corte abrupto, evocando una influencia de los modelos Audi Avant pero con un enfoque propio de estilo del bloque oriental. A pesar de su aspecto sencillo, el Dacia 1325 Liberta estaba bien logrado para los estándares de producción de la época, lo que le dio una ventaja frente a otros modelos más anticuados.

Interior y confort

Dentro del Dacia 1325 Liberta, la renovación continuó. El diseño del tablero de instrumentos era completamente nuevo en comparación con los modelos previos de Dacia. La nueva disposición contaba con una consola central más alta y un mayor número de ventiladores, que mejoraban la circulación del aire en el habitáculo. Además, el coche incluía un guantera más grande, lo que ofrecía una mayor capacidad de almacenamiento para los ocupantes.

El cuadro de instrumentos era también más completo y sofisticado en comparación con lo que los conductores de Dacia estaban acostumbrados. Además de los medidores tradicionales como el velocímetro, el tacómetro y los indicadores de temperatura del motor y nivel de combustible, el Dacia 1325 Liberta ofrecía una serie de medidores adicionales, tales como el indicador de presión de aceite y un amperímetro, lo que indicaba un enfoque más avanzado en términos de monitoreo del rendimiento del vehículo.

Los asientos traseros eran plegables de una sola pieza, lo que ofrecía una mayor versatilidad en el uso del espacio interior y permitía al propietario transportar objetos más grandes cuando fuera necesario. Aunque no se trataba de un coche de lujo, el interior del Dacia 1325 Liberta ofrecía un equilibrio razonable entre funcionalidad y comodidad.

Motor y rendimiento

El Dacia 1325 Liberta de 1990 a 1996 estaba impulsado por un motor de 1.4 litros basado en el ya antiguo motor Renault de 1.3 litros. Este motor, con un sistema de carburador y válvulas en la cabeza, entregaba una potencia modesta de 62 caballos de fuerza a 5000 rpm, lo que le permitía alcanzar una velocidad máxima de 145 km/h (90 mph). El torque alcanzaba los 100 Nm a 3000 rpm, lo que proporcionaba una conducción bastante decente para un coche de su categoría.

A pesar de que el motor no ofrecía grandes cifras de potencia, el Dacia 1325 Liberta estaba bien equilibrado en términos de eficiencia de combustible, alcanzando un rendimiento combinado de 8.2 litros cada 100 km (28.7 mpg US). Esto lo hacía adecuado para el consumo diario y para aquellos que buscaban un coche accesible con un costo operativo relativamente bajo.

El Liberta estaba equipado con una caja de cambios manual de 5 marchas, lo que le otorgaba un toque más deportivo y dinámico en comparación con otros coches de la misma gama. La tracción era delantera, y el sistema de frenos estaba compuesto por discos en la parte delantera y tambores en la parte trasera, un diseño simple pero efectivo para la época.

Dimensiones y características técnicas

El Dacia 1325 Liberta tenía unas dimensiones que lo posicionaban dentro del segmento de los compactos. Su longitud era de 4150 mm, con un ancho de 1636 mm y una altura de 1430 mm. La distancia entre ejes era de 2441 mm, lo que aseguraba una buena estabilidad en carretera. El peso en vacío del vehículo era de 935 kg, lo que lo hacía relativamente ligero para su tamaño.

La capacidad de carga no estaba especificada en los datos oficiales, pero se sabía que el Liberta contaba con un maletero razonablemente espacioso para un coche de su tamaño, especialmente cuando los asientos traseros eran abatidos. El despeje del suelo era de 109 mm, lo que proporcionaba una distancia adecuada entre el chasis y la carretera para evitar daños en superficies irregulares.

Rendimiento en carretera

En términos de desempeño, el Dacia 1325 Liberta no era un coche deportivo, pero ofrecía una conducción satisfactoria para los estándares de los años 90. El coche alcanzaba los 100 km/h en 17.5 segundos, lo cual es una cifra modesta comparada con los coches actuales, pero que era razonable en el contexto de su tiempo y segmento. El Dacia 1325 Liberta era ideal para la conducción urbana y suburbana, con un buen nivel de confort y fiabilidad para su precio.

Conclusión

El Dacia 1325 Liberta de 1990-1996 se destacó como un modelo de transición importante para la marca rumana. Su diseño más moderno y su capacidad para ofrecer un rendimiento adecuado a un precio accesible lo hicieron un vehículo popular en Rumanía y en otros países de Europa del Este. Aunque no era un coche de lujo ni de alto rendimiento, el Liberta demostró ser un ejemplo de cómo Dacia intentaba adaptarse a los tiempos cambiantes y competir con otras marcas en el mercado europeo. Al igual que otros modelos de la época, el Dacia 1325 Liberta se convirtió en un símbolo de la transición de Rumanía hacia una nueva era tras la caída del régimen comunista.

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