El cultivo de hongos en casa, específicamente el hongo comestible más común, el champiñón (Agaricus bisporus), se ha vuelto una práctica cada vez más popular debido a su facilidad de producción, el bajo coste y los beneficios nutricionales. Los hongos son una excelente fuente de vitaminas, minerales y antioxidantes, y además pueden crecer en espacios reducidos, lo que los convierte en una opción ideal para aquellos que desean cultivar sus propios alimentos en casa. A continuación, se describe de manera detallada cómo cultivar hongos en el hogar.
¿Qué son los hongos y por qué cultivarlos?
Los hongos son organismos que pertenecen al reino de los Fungi y se diferencian de las plantas porque no realizan la fotosíntesis. En lugar de depender de la luz solar, los hongos obtienen su energía descomponiendo materia orgánica. El champiñón es un tipo de hongo que crece naturalmente en ambientes oscuros y húmedos, descomponiendo materiales como estiércol, hojas y otros residuos vegetales.
El cultivo de hongos en casa es ventajoso porque permite tener un suministro constante de alimentos frescos, ricos en nutrientes y sin la necesidad de productos químicos. Además, el proceso de cultivo es respetuoso con el medio ambiente, ya que el sustrato utilizado puede ser reciclado o compostado una vez que el hongo ha sido cosechado.
Materiales necesarios para cultivar hongos
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Micelio o esporas de hongo: El micelio es la parte vegetativa del hongo, que es similar a las raíces de una planta. Este se puede comprar en tiendas especializadas o en línea. Otra opción es usar esporas de hongos, que son las «semillas» que permiten el crecimiento de nuevos hongos.
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Sustrato adecuado: Los champiñones crecen mejor en un sustrato rico en materia orgánica, como estiércol de caballo o vaca bien compostado, paja, aserrín o posos de café. Este sustrato debe estar esterilizado para evitar el crecimiento de moho u otros organismos competidores.
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Contenedores o bandejas de cultivo: Se pueden usar cajas de madera, cubos de plástico o bolsas de cultivo. Estos contenedores deben permitir un buen drenaje y aireación.
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Un espacio oscuro y húmedo: Los hongos prefieren crecer en lugares con poca luz y alta humedad. Un sótano, un armario o incluso una esquina oscura de una habitación puede ser adecuado para este propósito.
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Agua pulverizada: Para mantener el ambiente húmedo, necesitarás agua pulverizada o una botella de spray para regar los hongos regularmente.
Pasos para cultivar hongos en casa
1. Preparar el sustrato
El sustrato es fundamental para el éxito del cultivo de hongos, ya que proporciona los nutrientes necesarios para el desarrollo del micelio. Si estás usando estiércol, asegúrate de que esté bien compostado y mezclado con paja para mejorar la textura y la aireación. Si utilizas posos de café o aserrín, asegúrate de que estén esterilizados hirviéndolos para eliminar cualquier bacteria o moho no deseado.
Una vez que tengas el sustrato listo, colócalo en el recipiente de cultivo, llenándolo hasta aproximadamente tres cuartas partes de su capacidad.
2. Inocular el sustrato con micelio
Una vez que el sustrato está preparado, es hora de agregar el micelio o las esporas de hongos. Si usas micelio, debes mezclarlo cuidadosamente con el sustrato para que las raíces del hongo comiencen a extenderse por todo el material orgánico. Si estás utilizando esporas, espárcelas uniformemente sobre la superficie del sustrato y cúbrelas con una fina capa de tierra o compost.
3. Mantener las condiciones adecuadas
El ambiente en el que cultives los hongos debe ser oscuro, fresco y húmedo. La temperatura ideal para el crecimiento de los champiñones oscila entre los 13°C y los 20°C. Es importante mantener una humedad alta, alrededor del 90%, lo que se puede lograr rociando el sustrato con agua regularmente, pero sin encharcarlo.
Si el lugar donde estás cultivando los hongos es demasiado seco, puedes cubrir el recipiente con plástico o tela para retener la humedad. Recuerda que los hongos no necesitan luz solar para crecer, así que un lugar oscuro es perfecto.
4. Incubación del micelio
Durante las primeras dos o tres semanas, el micelio comenzará a colonizar el sustrato. Este proceso se llama incubación y es crucial para el crecimiento de los hongos. Durante este tiempo, es fundamental mantener el sustrato húmedo y evitar la exposición a corrientes de aire o temperaturas extremas.
A medida que el micelio crece, verás que el sustrato comienza a cubrirse con un material blanco parecido a un moho. Esto es completamente normal y es señal de que el micelio está prosperando.
5. Aparición de los primordios y fructificación
Después de la fase de incubación, comenzarán a aparecer pequeños botones o primordios en la superficie del sustrato. Estos son los futuros hongos. En esta etapa, es importante reducir ligeramente la temperatura (a unos 12°C) y continuar manteniendo alta la humedad.
En pocos días, estos botones crecerán y se convertirán en champiñones completamente desarrollados, listos para cosechar. La recolección debe realizarse cuando los champiñones tengan un tamaño adecuado y antes de que los sombreros se abran por completo.
6. Cosecha
Para cosechar los hongos, simplemente gira suavemente el champiñón hasta que se desprenda del sustrato. Evita arrancarlos bruscamente, ya que esto puede dañar el micelio subyacente, impidiendo que nuevos hongos crezcan en esa área.
Después de la primera cosecha, el micelio puede seguir produciendo hongos durante varias semanas. Asegúrate de seguir rociando agua y manteniendo el ambiente adecuado para prolongar la fructificación.
Consejos adicionales para el cultivo de hongos
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Reutilización del sustrato: Después de varias cosechas, el sustrato puede agotarse y dejar de producir hongos. Sin embargo, este sustrato puede ser compostado y utilizado en el jardín para enriquecer el suelo.
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Uso de otros tipos de hongos: Aunque el champiñón es el hongo más común para cultivar en casa, también se pueden cultivar otras variedades como las setas shiitake (Lentinula edodes), setas ostra (Pleurotus ostreatus) y maitake (Grifola frondosa). Cada tipo de hongo tiene requisitos específicos en cuanto a sustrato y condiciones de crecimiento.
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Control de plagas y enfermedades: Aunque los hongos son relativamente resistentes a las plagas, es posible que en ocasiones aparezcan mohos o insectos en el sustrato. Para prevenir esto, asegúrate de trabajar con materiales esterilizados y mantener el área de cultivo limpia.
Beneficios de cultivar hongos en casa
El cultivo de hongos en el hogar no solo proporciona una fuente de alimento saludable y orgánico, sino que también tiene otros beneficios. Los hongos son una fuente rica en