Consejos para Comer Saludablemente Fuera

Seleccionar alimentos saludables cuando comes fuera de casa puede ser un desafío, pero con algunos consejos simples puedes tomar decisiones más saludables sin comprometer el sabor o la satisfacción. Aquí te presento algunas estrategias para elegir opciones más saludables en restaurantes y otros establecimientos:

1. Investiga las opciones antes de ir: Muchos restaurantes tienen sus menús disponibles en línea. Antes de salir, tómate un tiempo para revisar el menú y buscar opciones más saludables. Esto te ayudará a tomar una decisión informada y evitar tomar decisiones impulsivas en el restaurante.

2. Prioriza las verduras y las ensaladas: Busca platos que estén llenos de verduras frescas y coloridas. Las ensaladas son una excelente opción, pero asegúrate de que estén cargadas con una variedad de ingredientes nutritivos, como verduras de hoja verde, tomates, pepinos, zanahorias y otras verduras frescas. Opta por aderezos más ligeros, como vinagretas a base de aceite de oliva y vinagre balsámico, en lugar de aderezos cremosos y altos en calorías.

3. Controla las porciones: Las porciones en los restaurantes suelen ser más grandes de lo necesario. Considera compartir un plato con un amigo o familiares, o pide una porción más pequeña si está disponible. También puedes pedir que te empaquen la mitad de tu comida para llevar antes de empezar a comer, así te aseguras de no excederte en las porciones.

4. Elige métodos de cocción saludables: Opta por alimentos que estén cocinados al vapor, asados, a la parrilla o al horno en lugar de fritos o empanizados. Estos métodos de cocción tienden a agregar menos calorías y grasas saturadas a los platos. Siempre puedes pedir que te preparen tu comida de una manera específica si el restaurante lo permite.

5. Controla los acompañamientos: A menudo, los acompañamientos pueden agregar muchas calorías y grasas innecesarias a tu comida. Opta por opciones más saludables, como ensaladas verdes o verduras al vapor, en lugar de papas fritas, arroz frito o puré de papas cargado de mantequilla y crema.

6. Ten cuidado con las salsas y condimentos: Las salsas y condimentos pueden convertir una comida relativamente saludable en una bomba de calorías y sodio. Evita salsas cremosas, aderezos grasosos y condimentos ricos en sodio. En su lugar, elige opciones más saludables, como salsa de tomate, salsa de soja baja en sodio, vinagretas ligeras o aderezos caseros más saludables.

7. Haz sustituciones inteligentes: Siempre que sea posible, haz sustituciones inteligentes para hacer que tu comida sea más saludable. Por ejemplo, si estás en un restaurante de comida rápida, considera pedir una hamburguesa sin pan o una ensalada en lugar de una hamburguesa con papas fritas. En los restaurantes que permiten personalizar tu pedido, aprovecha esta opción para hacer elecciones más saludables.

8. Presta atención a las palabras clave: Al leer el menú, presta atención a las palabras que puedan indicar opciones más saludables, como «a la parrilla», «al vapor», «sin salsas», «sin crema», «sin frituras», «a la plancha», «a la brasa» o «sin azúcar añadido».

9. No te saltes las comidas: Si sabes que vas a comer fuera, no te saltes las comidas anteriores pensando que así podrás comer más en el restaurante. Saltarte las comidas puede hacer que llegues al restaurante con mucha hambre, lo que aumenta las probabilidades de tomar decisiones poco saludables y excederte en las porciones.

10. Disfruta con moderación: No te castigues por disfrutar de una comida fuera de casa. Es perfectamente saludable disfrutar de tus comidas favoritas de vez en cuando, siempre y cuando lo hagas con moderación y tengas en cuenta tus elecciones alimenticias en general.

Siguiendo estos consejos, puedes tomar decisiones más saludables cuando comas fuera de casa sin sentir que estás privándote de disfrutar de una deliciosa comida. Recuerda que la clave está en la moderación y en encontrar un equilibrio que funcione para ti y tu estilo de vida.

Por supuesto, profundicemos en cada uno de los puntos anteriores y exploremos algunas estrategias adicionales para elegir alimentos más saludables cuando comes fuera:

1. Investiga las opciones antes de ir: Además de revisar el menú en línea, también puedes buscar reseñas y recomendaciones sobre el restaurante que planeas visitar. Las reseñas pueden darte una idea de qué platos son populares y cuáles son más saludables. Además, algunas aplicaciones móviles y sitios web están diseñados específicamente para ayudarte a encontrar opciones saludables en restaurantes cercanos.

2. Prioriza las verduras y las ensaladas: Algunos restaurantes ofrecen opciones de ensaladas más sustanciosas que pueden servir como plato principal. Busca ensaladas que incluyan proteínas magras, como pollo a la parrilla, pescado o tofu, para una comida completa y satisfactoria. También puedes pedir que agreguen más verduras a otros platos, como pizzas, pastas o sándwiches, para aumentar su contenido nutricional.

3. Controla las porciones: Si el restaurante no ofrece opciones de porciones más pequeñas, considera compartir un plato con alguien más o pide una entrada como plato principal en lugar de un plato principal completo. También puedes preguntar si es posible ordenar medias porciones de ciertos platos para reducir la cantidad de comida que se sirve en tu plato.

4. Elige métodos de cocción saludables: Algunos restaurantes pueden adaptar la forma en que cocinan tus alimentos según tus preferencias. Si tienes la opción, elige métodos de cocción más saludables, como a la parrilla o al vapor. También puedes pedir que eviten agregar aceites adicionales o mantequilla a tus platos durante la preparación.

5. Controla los acompañamientos: Si el plato que deseas viene con acompañamientos menos saludables, como papas fritas o puré de papas cargado de crema, pregunta si es posible sustituirlos por opciones más saludables, como una ensalada verde o verduras al vapor. Muchos restaurantes están dispuestos a hacer ajustes según tus preferencias.

6. Ten cuidado con las salsas y condimentos: Las salsas y condimentos pueden añadir una gran cantidad de calorías, grasas y sodio a tu comida. Siempre que sea posible, pide las salsas y aderezos por separado para que puedas controlar la cantidad que añades a tu comida. También puedes optar por salsas más ligeras o pedir que te sirvan las salsas en el lado para que puedas probarlas con moderación.

7. Haz sustituciones inteligentes: Aprende a hacer sustituciones inteligentes para reducir la cantidad de calorías y grasas en tus comidas. Por ejemplo, si estás en un restaurante de comida rápida, considera pedir una hamburguesa sin queso o sin mayonesa para reducir el contenido de grasas saturadas. También puedes optar por opciones más saludables de acompañamiento, como una ensalada fresca en lugar de papas fritas.

8. Presta atención a las palabras clave: Al leer el menú, presta atención a las palabras que puedan indicar opciones más saludables, como «a la parrilla», «al vapor», «sin salsas», «sin crema», «sin frituras», «a la plancha», «a la brasa» o «sin azúcar añadido». Estas palabras suelen indicar platos más saludables y con menos calorías y grasas.

9. No te saltes las comidas: Saltarse las comidas antes de salir a comer puede llevar a decisiones poco saludables y a excesos durante la comida. Asegúrate de comer algo ligero antes de salir, como una fruta o un puñado de frutos secos, para evitar llegar al restaurante con mucha hambre.

10. Disfruta con moderación: Recuerda que disfrutar de la comida es parte importante de la experiencia culinaria. No te castigues por disfrutar de un postre ocasional o una comida indulgente. La clave está en la moderación y en hacer elecciones saludables en general.

Al seguir estas estrategias y consejos, puedes disfrutar de comidas fuera de casa sin comprometer tu salud y bienestar. Recuerda que se trata de hacer elecciones conscientes y equilibradas que te permitan disfrutar de la comida mientras cuidas tu cuerpo.