CITROËN SM 1970-1975: Un automóvil revolucionario de los años 70
La década de 1970 fue testigo de una serie de avances tecnológicos en diversas áreas, incluidos los automóviles. Entre los modelos más innovadores de esa época, el CITROËN SM se destacó como una de las creaciones más notables tanto en diseño como en tecnología. Este modelo, producido entre 1970 y 1975, fue una combinación única de estilo, rendimiento y confort, lo que lo convirtió en un referente dentro de los automóviles de lujo y deportivos de su tiempo.
Orígenes y diseño del CITROËN SM
El CITROËN SM fue presentado en el Salón del Automóvil de Ginebra en 1970, marcando un hito en la historia de la automoción. Su diseño exterior, realizado por el jefe de diseño de Citroën, Robert Opron, no solo era vanguardista, sino también aerodinámico. El modelo SM era un coche de lujo, pero con la distinción de tener características de un deportivo, lo que lo hacía aún más impresionante.
En términos de aerodinámica, el SM representaba un avance significativo en relación con su predecesor, el Citroën DS. Gracias a una serie de pruebas de túnel de viento durante el proceso de desarrollo, se logró mejorar su rendimiento en un 25%. Esto no solo contribuyó a su aspecto futurista, sino también a la eficiencia de su desempeño a altas velocidades. El modelo SM era un coche rápido, con una velocidad máxima de 220 km/h (137 mph), lo que lo acercaba a la categoría de vehículos deportivos.
El SM fue el resultado de la colaboración entre Citroën y Maserati, dos marcas con una fuerte tradición en ingeniería y diseño. Sin embargo, fue la inclusión de un motor V6 de 2.7 litros de Maserati lo que le dio una potencia impresionante, pero también lo convirtió en un vehículo costoso debido a los altos impuestos asociados con la cilindrada de su motor.
Motor y rendimiento
El CITROËN SM estaba equipado con un motor V6 de 2.7 litros que producía una potencia de 181 caballos de fuerza (HP) a 6250 revoluciones por minuto (RPM). Este motor, combinado con una caja de cambios manual de 5 velocidades, permitía que el coche alcanzara una velocidad máxima de 220 km/h, un rendimiento impresionante para la época. Además, el motor era alimentado por un sistema de tres carburadores, lo que aseguraba un suministro adecuado de combustible, aunque la eficiencia de combustible no era su punto fuerte.
En cuanto a la aceleración, el SM podía pasar de 0 a 100 km/h (62 mph) en 8.9 segundos, lo que lo ubicaba en la categoría de coches deportivos de lujo, capaces de ofrecer una experiencia de conducción emocionante y ágil. El coche estaba diseñado con un sistema de tracción delantera, algo innovador en esos años para los vehículos deportivos, lo que le confería una estabilidad y manejabilidad excepcionales.
Suspensión y confort
Una de las características más sobresalientes del CITROËN SM era su sistema de suspensión hidráulica, una herencia directa del Citroën DS. Este sistema no solo ofrecía un confort sin igual, sino que también permitía que el coche se mantuviera nivelado independientemente de la carga. El SM fue diseñado para ser un GT (gran turismo) que priorizaba el confort de sus ocupantes sin sacrificar el rendimiento. Esto lo hacía adecuado tanto para viajes largos como para una conducción dinámica en carreteras sinuosas.
A pesar de que el sistema hidráulico proporcionaba una conducción suave, uno de los aspectos que recibió críticas fue el sistema de dirección asistida variable que, aunque innovador, no ofrecía la mejor retroalimentación al conductor. Este sistema fue desarrollado para mitigar el problema del torque steer, algo común en los coches con tracción delantera, pero no fue perfeccionado en su totalidad en el SM.
Tecnología avanzada y seguridad
El CITROËN SM no solo era un coche de lujo, sino también un vehículo con una impresionante cantidad de tecnología para su tiempo. En cuanto a seguridad, el SM estaba equipado con frenos de disco en ambas extremidades (delante y detrás), lo que le otorgaba un rendimiento de frenado superior al de muchos de sus competidores. Además, la carrocería estaba diseñada para minimizar la resistencia al aire, lo que también tenía un impacto positivo en la eficiencia de combustible y la estabilidad a altas velocidades.
Un aspecto crucial de este automóvil era su sistema hidráulico, que no solo se encargaba de la suspensión, sino también de otros elementos como el freno de estacionamiento y el control de altura del vehículo, lo que otorgaba al SM una sensación única de confort y control.
Dimensiones y características exteriores
En términos de tamaño, el CITROËN SM era un coche grande para su época. Sus longitud de 4.892 mm (192.6 pulgadas), ancho de 1.836 mm (72.3 pulgadas) y altura de 1.323 mm (52.1 pulgadas) le otorgaban una presencia imponente en la carretera. Su distancia entre ejes de 2.949 mm (116.1 pulgadas) proporcionaba una gran estabilidad a alta velocidad, mientras que su despeje al suelo de 152 mm (6 pulgadas) aseguraba un buen rendimiento en carreteras en mal estado.
Desempeño de combustible y economía
El rendimiento de combustible del CITROËN SM no era su punto fuerte. Con un consumo combinado de 18.8 millas por galón (12.5 litros cada 100 km), este coche no era tan eficiente como otros modelos de la época. Sin embargo, esto era comprensible dado que su motor de gran cilindrada y sus características de lujo y rendimiento requerían un mayor consumo de combustible.
El tanque de combustible del SM tenía una capacidad de 90.1 litros (23.8 galones), lo que permitía una autonomía razonable para viajes largos, aunque la economía de combustible no era uno de sus puntos destacados.
Problemas comerciales y legado
A pesar de ser un coche técnicamente avanzado, el CITROËN SM no tuvo el éxito comercial que muchos esperaban. La razón principal fue su motor V6 de alto cubicaje, que lo hacía vulnerable a altos impuestos debido a su cilindrada. Esto limitó su atractivo en muchos mercados, especialmente en aquellos donde los impuestos a vehículos de gran cilindrada eran elevados.
Otro factor que contribuyó a su fracaso comercial fue el costo elevado de fabricación debido a las complejidades del sistema hidráulico y la colaboración con Maserati para el desarrollo del motor. A pesar de su alto precio y la limitada producción, el SM sigue siendo considerado un coche de culto entre los entusiastas de los automóviles clásicos.
Conclusión
El CITROËN SM representa un hito en la historia de la automoción, siendo un vehículo que combinó el lujo, la tecnología avanzada y el rendimiento en un solo paquete. Aunque su comercialización no fue un éxito rotundo, su legado perdura, y hoy en día sigue siendo apreciado por coleccionistas y aficionados por su innovación y su estilo único. Un coche que no solo fue un producto de su tiempo, sino que también anticipó muchas de las tecnologías que más tarde serían comunes en otros vehículos de lujo y deportivos.
En el CITROËN SM se fusionaron la visión futurista de los diseñadores de la época y el deseo de ofrecer un automóvil que no solo fuera rápido, sino también cómodo y seguro. Un vehículo que sigue siendo, más de 50 años después de su lanzamiento, un referente en la historia de los automóviles de lujo y tecnología avanzada.