BMW 1 Series (F20) LCI 2017-2019: Un vistazo a la evolución del compacto premium
La BMW Serie 1 (F20) LCI, producida entre 2017 y 2019, representó una importante actualización en la historia del modelo, que mantuvo la esencia de la marca mientras se adaptaba a las tendencias y expectativas cambiantes de los consumidores. Esta actualización, conocida como LCI (Life Cycle Impulse), marcó la última gran mejora para la segunda generación de la Serie 1, antes de que la firma alemana diera el salto hacia una nueva plataforma con tracción delantera en 2019. A lo largo de este artículo, exploraremos las características, especificaciones y aspectos destacados del BMW 1 Series (F20) LCI, haciendo especial énfasis en los detalles que lo convierten en un referente dentro de los hatchbacks compactos premium.
Un diseño refinado: ligeras modificaciones exteriores
El rediseño de la BMW Serie 1 (F20) LCI no implicó un cambio radical, pero sí un enfoque en la modernización de su aspecto exterior. Aunque el modelo original ya tenía una apariencia deportiva y dinámica, BMW decidió refinar ciertos detalles para mantener la relevancia estética de la Serie 1 dentro del competitivo mercado de hatchbacks premium. Entre los cambios más visibles se encontraba la introducción de ediciones especiales como la Edition Sport Line Shadow, Edition M Sport Shadow y la BMW M140i Edition Shadow.
Estas ediciones, que destacaban por un estilo más agresivo y deportivo, incorporaron elementos como la parrilla frontal negra, inserciones oscuras en los faros LED y luces traseras LED oscurecidas. Estos detalles no solo enfatizaban el carácter deportivo del vehículo, sino que también mejoraban la imagen de la Serie 1 como un coche de alto rendimiento, manteniendo el diseño distintivo que la hacía reconocible como un producto de la marca alemana.
Además de estas modificaciones, la parte frontal recibió un ajuste sutil en los paragolpes y una mejora en las ópticas, que ofrecían una mayor visibilidad y un aspecto más moderno. Los cambios fueron lo suficientemente discretos como para no alterar la identidad original del modelo, pero lo suficientemente efectivos para garantizar que la BMW Serie 1 se mantuviera competitiva frente a otros modelos de su segmento.
Interior: un salto hacia la tecnología con iDrive táctil
El interior del BMW 1 Series (F20) LCI siguió la línea de diseño deportiva y premium de la marca, pero con una mejora importante en términos tecnológicos. BMW, que había sido pionera en la integración de sistemas de infoentretenimiento mediante su sistema iDrive, finalmente dio el salto a la pantalla táctil con la actualización LCI. Aunque el sistema iDrive había estado presente en varios modelos de la marca desde su introducción en el BMW 7 Series, la implementación de una pantalla táctil representó un avance significativo, facilitando la interacción con los sistemas de audio, teléfono y navegación.
Sin embargo, a pesar de la modernización tecnológica, el espacio en la parte trasera seguía siendo limitado debido a la necesidad de un túnel central elevado para alojar la transmisión, lo que reducía la comodidad para los pasajeros en los asientos traseros. A pesar de esta limitación en el espacio, el BMW 1 Series (F20) LCI seguía siendo un vehículo agradable para quienes viajaban al frente, gracias a los asientos deportivos, el volante multifuncional y una calidad de materiales que continuaba en línea con los altos estándares de BMW.
Motorizaciones y rendimiento: una gama amplia y opciones de tracción
La BMW Serie 1 (F20) LCI mantuvo una amplia gama de opciones de motorización, permitiendo a los compradores elegir entre varios motores que variaban en términos de potencia y eficiencia. La versión base, representada por el 116i 6MT (109 HP), contaba con un motor de 3 cilindros de 1.5 litros, capaz de generar 109 caballos de fuerza a 4.250 rpm. Esta motorización se combinaba con una caja de cambios manual de 6 velocidades y tracción trasera, lo que le otorgaba una sensación de conducción dinámica, característica de los vehículos de la marca alemana.
Las versiones de mayor rendimiento, como la M140i, ofrecían una potencia significativamente mayor, acercándose a los 340 caballos de fuerza, con tracción en las cuatro ruedas y motores más potentes que hacían justicia al legado deportivo de la Serie 1. La posibilidad de elegir entre versiones de tracción trasera y tracción total brindaba a los conductores la opción de adaptar el comportamiento del vehículo a sus preferencias y necesidades.
Especificaciones técnicas destacadas
En términos de especificaciones, el BMW 1 Series (F20) LCI de 2017 a 2019 presentaba una serie de características que lo posicionaban como un modelo eficiente y bien equilibrado en su segmento. Con un motor de 3 cilindros y una cilindrada de 1499 cm³, el 116i ofrecía una potencia de 109 hp a 4.250 rpm, con un par motor de 180 Nm disponible entre las 1.250 y las 4.250 rpm. Esto le permitía alcanzar una velocidad máxima de 195 km/h, con una aceleración de 0 a 100 km/h en 10,9 segundos, una cifra respetable para un vehículo de su categoría.
En términos de consumo de combustible, el 116i destacaba por su eficiencia, con una cifra de 5 litros por cada 100 km recorridos en condiciones combinadas, lo que se traducía en aproximadamente 47 millas por galón en el ciclo estadounidense. En condiciones urbanas, el consumo se elevaba a 6,3 litros por cada 100 km, lo que representaba una cifra bastante competitiva en comparación con otros modelos en el mercado.
El peso en vacío del vehículo era de 1.380 kg, lo que le confería una buena relación peso-potencia, y la capacidad del maletero era de 360 litros, ofreciendo un buen espacio para el equipaje. La capacidad de combustible se mantenía en 51,9 litros, lo que proporcionaba una autonomía adecuada para viajes largos, con un alcance de más de 800 km en condiciones de conducción eficiente.
Conclusión: la despedida de la tracción trasera en un compacto
El BMW 1 Series (F20) LCI de 2017-2019 representó una evolución natural del modelo original, con pequeños ajustes en el diseño, una mejora tecnológica importante con la inclusión de la pantalla táctil en el sistema iDrive y una gama de motorizaciones que abarcaba desde versiones más modestas hasta opciones de alto rendimiento. Sin embargo, lo que realmente marcó el fin de una era fue la transición hacia la tracción delantera en la nueva generación de la Serie 1 en 2019. La tracción trasera había sido uno de los rasgos distintivos de este modelo, lo que le otorgaba una conducción más dinámica y deportiva, pero BMW decidió seguir las tendencias del mercado y adoptar la tracción delantera para mejorar la eficiencia y reducir costos de producción.
A pesar de este cambio, la BMW 1 Series (F20) LCI seguía siendo una opción muy atractiva para aquellos que buscaban un hatchback premium con una conducción entretenida, un diseño sofisticado y una excelente calidad de construcción. La actualización LCI le permitió mantenerse vigente hasta el final de su ciclo de vida, ofreciendo una experiencia de conducción única que cautivó a muchos aficionados a la marca.