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Aston Martin Rapide S 2013-2018

Aston Martin Rapide S (2013-2018): Un Coupé Gran Turismo de Cuatro Puertas

Aston Martin, una marca con un legado de lujo y rendimiento, ha sido durante décadas sinónimo de coches deportivos que combinan elegancia con un rendimiento impresionante. Aunque su nombre está más comúnmente asociado con modelos de dos puertas como el DB9 o el V8 Vantage, la marca británica también ha demostrado su destreza en el desarrollo de sedanes deportivos de cuatro puertas. A lo largo de los años, Aston Martin ha demostrado que puede llevar la esencia del Gran Turismo a un formato de cuatro puertas sin perder la esencia deportiva y el carácter exclusivo que la marca siempre ha representado. El modelo Rapide, lanzado en 2010, fue el primer gran paso en esta dirección, y en 2013, Aston Martin presentó una versión mejorada y más potente: el Rapide S.

Un Gran Turismo de Cuatro Puertas

El Aston Martin Rapide S, producido entre 2013 y 2018, es un verdadero ejemplo de lo que representa un Gran Turismo de cuatro puertas. Este modelo, que comparte muchas características con su predecesor, el Rapide, se diferencia en aspectos clave tanto a nivel técnico como de diseño. Aunque a primera vista el Rapide S y el Rapide pueden parecer casi idénticos, hay una serie de diferencias sutiles que los distinguen. Sin embargo, antes de profundizar en las especificaciones y cambios, es fundamental comprender qué hace especial al Rapide S dentro de la gama de Aston Martin y el mercado de los vehículos de lujo.

En primer lugar, el Rapide S mantiene la arquitectura de un coupé de cuatro puertas, lo que le da un diseño fluido y aerodinámico. La línea del techo es baja y elegante, lo que refuerza su apariencia deportiva a pesar de su mayor tamaño y las dos puertas adicionales. Este es un vehículo de lujo que no sacrifica el rendimiento por la comodidad ni viceversa, lo que lo convierte en una excelente opción para aquellos que buscan un coche deportivo con capacidad para más de dos personas.

Cambios Estéticos y Técnicos

Uno de los aspectos más notables del Rapide S es cómo Aston Martin mejoró varios componentes de su predecesor sin alterar su diseño icónico. Desde una perspectiva estética, las diferencias entre el Rapide y el Rapide S son bastante sutiles, lo que hace que solo un ojo experto pueda notar las distinciones. El modelo Rapide S presenta una parrilla frontal de aluminio más grande y única en lugar de la parrilla dividida en dos partes que se encontraba en el Rapide. Además, el Rapide S viene equipado con nuevas llantas de aleación forjada de 20 pulgadas, que no solo mejoran la estética del coche, sino que también contribuyen a su rendimiento general. En la parte trasera, el Rapide S recibe una extensión en el alerón, conocido como «duck-tail», que no solo mejora la estética, sino que también optimiza la aerodinámica del vehículo.

Si bien las diferencias exteriores son notables, en el interior, el Rapide S mantiene el mismo nivel de lujo y sofisticación que se espera de Aston Martin. Los materiales y colores utilizados en el interior son los mismos que los del modelo anterior, lo que muestra que la marca no consideró necesario cambiar lo que ya estaba siendo muy bien recibido. De esta manera, el Rapide S se presenta como una evolución de un modelo que ya era ampliamente apreciado.

Mejoras en el Rendimiento

El Rapide S se distingue del Rapide no solo por su diseño, sino también por mejoras sustanciales en su rendimiento. Aunque ambos vehículos comparten el mismo motor V12 de 6.0 litros, el Rapide S presenta una versión más potente del mismo. El motor del Rapide S produce 558 caballos de fuerza (410 kW) a 6750 revoluciones por minuto (RPM), lo que representa un aumento respecto a los 470 caballos de fuerza del Rapide. Además, el torque también mejora, alcanzando los 620 Nm a 5500 RPM, lo que le permite al Rapide S una aceleración más rápida y una mayor capacidad de respuesta.

Gracias a estas mejoras en el motor y a otros ajustes en la transmisión, el Rapide S es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h (0 a 62 mph) en solo 4.9 segundos, una cifra impresionante para un vehículo de cuatro puertas. Esta aceleración es posible gracias al sistema de control de suspensión adaptativa mejorado, que permite al Rapide S tener un manejo más preciso y una mayor estabilidad en diferentes condiciones de conducción.

El Rapide S cuenta con una transmisión manual de seis velocidades con un sistema de control electrónico “shift-by-wire”, que ofrece cambios de marcha rápidos y precisos. El sistema de frenos también ha sido mejorado, con discos de freno de doble fundición en el eje delantero y trasero, que cuentan con pinzas monobloque de seis y cuatro pistones, respectivamente. Estos componentes permiten al Rapide S detenerse con una gran eficacia, incluso a altas velocidades.

Especificaciones Técnicas del Aston Martin Rapide S

El Aston Martin Rapide S es un coche que se construyó para ofrecer la mejor experiencia de conducción posible. Sus especificaciones técnicas demuestran su capacidad para competir en el mundo de los coches de lujo y alto rendimiento.

  • Motor: V12 de 6.0 litros con inyección directa de combustible.
  • Potencia: 558 caballos de fuerza (410 kW) a 6750 RPM.
  • Torque: 457 lb-ft (620 Nm) a 5500 RPM.
  • Transmisión: Caja de cambios manual de seis velocidades con control electrónico «shift-by-wire».
  • Rendimiento: Aceleración de 0 a 100 km/h en 4.9 segundos.
  • Velocidad máxima: 306 km/h (190 mph).
  • Consumo de combustible: 11 mpg en ciudad (21.4 L/100 km) y 16.4 mpg en carretera (14.3 L/100 km).
  • Emisiones de CO2: 332 g/km.
  • Suspensión: Suspensión adaptativa de doble horquilla con mejoras en el control para un manejo más preciso.
  • Frenos: Discos de freno de doble fundición, 398 mm en el frente con pinzas de seis pistones y 360 mm en la parte trasera con pinzas de cuatro pistones.
  • Llantas: 245/35 ZR20 en el eje delantero y 295/30 ZR20 en el trasero.

Diseño y Dimensiones

En términos de dimensiones, el Rapide S es un coche imponente y elegante, con una longitud de 5019 mm (197.6 pulgadas), una anchura de 2141 mm (84.3 pulgadas) y una altura de 1349 mm (53.1 pulgadas). Su distancia entre ejes de 2990 mm (117.7 pulgadas) proporciona una base estable y cómoda, especialmente en viajes largos. A pesar de sus impresionantes dimensiones, el Rapide S mantiene una agilidad notable, lo que lo hace adecuado para maniobras deportivas a altas velocidades.

El diseño de su carrocería es elegante y fluido, con una aerodinámica que permite al coche mantener una estabilidad excepcional incluso a altas velocidades. Esto es crucial, ya que, al ser un Gran Turismo, el Rapide S está diseñado no solo para las carreras en pista, sino también para viajes largos y cómodos, sin sacrificar la agilidad y el rendimiento.

Conclusión

El Aston Martin Rapide S es un coche de lujo excepcional que fusiona el rendimiento, la comodidad y el diseño elegante de un Gran Turismo de cuatro puertas. Con mejoras sutiles pero significativas respecto al Rapide original, el Rapide S ofrece una experiencia de conducción inigualable, sin perder su esencia de superdeportivo. Ya sea que se esté buscando un coche para disfrutar de una conducción deportiva o para viajar con lujo y confort, el Rapide S cumple con ambas expectativas.

En resumen, el Aston Martin Rapide S es una obra maestra de la ingeniería automotriz, una muestra de cómo un coche de cuatro puertas puede ofrecer el rendimiento de un deportivo de dos puertas, con el lujo y la sofisticación que solo Aston Martin sabe ofrecer.

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