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AC Ace: Roadster Innovador

AC Ace 1993-1996: La reinterpretación moderna de un ícono británico

El AC Ace de 1993 a 1996 marcó el intento de revitalizar la histórica marca británica AC bajo la dirección de Ford y Brian Angliss. Aunque la marca AC alcanzó fama mundial con sus modelos de los años 50 y 60, este nuevo modelo no logró igualar las expectativas iniciales, a pesar de sus innovaciones. Conocido posteriormente como el Brooklands Ace para evitar confusiones con el modelo original, esta reinterpretación buscó combinar diseño clásico con tecnología moderna.


Diseño y Estilo

Con el reconocido diseñador Len Bailey a la cabeza, el AC Ace de los años 90 se presentó como un vehículo 2+2 con carrocería descapotable. Inicialmente, el prototipo, apodado «Ace of Spades», presentaba un techo targa, pero la versión final adoptó una estética más tradicional de roadster. Este diseño destacaba por su frente estrecho, una parrilla de radiador pequeña y redondeada, y faros circulares que evocaban un aire retro. Para acomodar el motor V8, se añadió una prominente protuberancia en el capó, dándole un toque muscular.

En la parte trasera, el vehículo incluía un maletero corto, luces traseras redondeadas en disposición cuádruple y un sistema de escape dual. La capota eléctrica de lona retráctil ofrecía protección contra la lluvia, mientras que los gruesos pilares A y un parabrisas inclinado aportaban seguridad adicional.


Innovaciones Estructurales

Uno de los aspectos más revolucionarios del AC Ace fue su chasis. Este modelo introdujo el primer chasis de acero inoxidable en la industria automotriz, lo que proporcionaba durabilidad y resistencia a la corrosión. Además, la distribución de peso casi perfecta de 50:50 y un diferencial de deslizamiento limitado mejoraron significativamente su maniobrabilidad.

El Ace también estaba equipado con frenos de disco ventilados en las cuatro ruedas y un sistema ABS de serie, características poco comunes en vehículos de su segmento en esa época.


Interior: Lujo y Confort

El interior del AC Ace no decepcionaba. Ofrecía asientos tapizados en cuero y un conjunto de características de confort que incluían:

  • Sistema de sonido con reproductor de cintas y CD.
  • Aire acondicionado.
  • Ventanas y espejos eléctricos.
  • Parabrisas con calefacción eléctrica, ideal para climas más fríos.

A pesar de ser un roadster deportivo, el Ace ofrecía cierto grado de practicidad con un maletero de 184 litros, adecuado para viajes cortos.


Rendimiento Mecánico

Bajo el capó, el AC Ace contaba con un motor V8 de 4.9 litros, cortesía de Ford, que producía 260 HP a 5250 RPM y un par motor de 320 lb-ft a 3250 RPM. Este motor estaba acoplado a una transmisión automática de cuatro velocidades, lo que ofrecía una experiencia de conducción suave pero poderosa.

Especificaciones clave del motor:

  • Tipo de combustible: Gasolina.
  • Sistema de alimentación: Inyección multipunto, naturalmente aspirado.
  • Tracción: Trasera.
  • Velocidad máxima: 140 mph (225 km/h).
  • Aceleración (0-100 km/h): N/D.
  • Consumo combinado: 27.4 mpg (8.6 L/100 km).

Dimensiones y Aerodinámica

El AC Ace presentaba un diseño compacto y aerodinámico. Sus dimensiones contribuían tanto a su estética elegante como a su rendimiento dinámico:

Especificación Medida
Longitud 174 in (4420 mm)
Anchura 73.6 in (1869 mm)
Altura 51.2 in (1300 mm)
Distancia entre ejes 97.3 in (2471 mm)
Peso sin carga 3175 lbs (1440 kg)
Volumen del maletero 6.5 cuFT (184 L)
Capacidad del depósito 21.1 galones (79.9 L)

El tamaño de las ruedas, 225/50 ZR16, y la baja altura al suelo, contribuyeron a un centro de gravedad bajo, mejorando la estabilidad.


Prestaciones y Comodidad en la Carretera

Gracias a su chasis innovador y distribución de peso, el Ace ofrecía una conducción ágil, ideal para carreteras sinuosas. Su configuración de suspensión, combinada con los neumáticos de alto rendimiento, aseguraba un excelente agarre. Aunque no era un superdeportivo en términos de velocidad máxima o aceleración, brindaba una experiencia de conducción equilibrada y refinada.


Conclusión

El AC Ace de 1993 a 1996 fue un intento audaz de combinar tradición e innovación. Aunque no logró el mismo impacto que sus predecesores, destacó por sus características técnicas únicas, como el chasis de acero inoxidable, y su diseño cuidadosamente elaborado. Para los entusiastas de los automóviles clásicos modernos, el Brooklands Ace representa un capítulo interesante en la historia de AC Cars, marcando una transición entre la nostalgia y la modernidad.

Si bien no alcanzó el éxito comercial esperado, su legado perdura como un ejemplo de la capacidad de la industria británica para reinventarse, incluso en momentos difíciles.

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